En reiteradas ocasiones hemos dado cuenta de hechos delictivos cometidos a bordo de una unidad del transporte urbano de pasajeros. Arrebatos, robos violentos contra pasajeros y choferes ocurren con frecuencia. Como respuesta a esta situación se coordinó la implementación de botones antipánico que han facilitado el accionar de la policía para dar respuesta inmediata ante hechos de robo o violencia. Pero lo ocurrido este sábado a bordo del
interno 34 de la línea 13 en Alto Verde incorpora un elemento que hasta el momento no había tomado trascendencia.
En circunstancias que, aparentemente, tendrían un trasfondo relacionado con alguna disputa entre los protagonistas y que son materia de investigación, dos jóvenes ingresaron al colectivo con un arma y atacaron a un pasajero que había ascendido a la unidad unas cuadras antes.
Frente a los presentes, los recién llegados dispararon -se presume con un arma de fabricación casera- y se dieron a la fuga.
El herido no presenta lesiones de consideración y escapó del lugar luego del ataque y los sospechosos son buscados por la policía.
A consecuencia de este violento episodio, los choferes de la línea 13 decidieron en asamblea no ingresar a Alto Verde cansados ya de ser testigos y víctimas de episodios violentos. Los trabajadores de la empresa de transporte decidieron sostener esta medida de fuerza hasta tanto se garantice la seguridad de los choferes y pasajeros.