En el Poder Ejecutivo no había -al menos al cierre de la presente edición- una postura política adoptada respecto del veto o la promulgación de la ley. Los funcionarios consultados por El Litoral advirtieron que no habían accedido aún a la iniciativa, y que por lo tanto, preferían no adelantar opinión. Otras fuentes del gobierno no ocultaron la sorpresa que generó el expeditivo trámite parlamentario, sobre todo, porque -según dijeron- existía un acuerdo con los gremios estatales y docentes para abordar el tema en las paritarias. Consultados sobre el costo que implicaría la nueva ley para el Estado, dijeron que no hay cálculos hechos todavía, pero confirmaron que la norma tendrá más peso en el sector educativo -por los docentes- y en salud, donde el personal de licencia necesariamente debe ser reemplazado.
En abril pasado, el gremio Amsafe incorporó el planteo de la extensión de la licencia por maternidad a las discusiones de las comisiones técnicas paritarias. Sin embargo, esta mañana y ante la consulta de El Litoral, su titular, Sonia Alesso, se mostró también sorprendida por la sanción de la ley. Aclaró que desconocía el proyecto presentado oportunamente en el Senado por Joaquín Gramajo, y adelantó que la próxima semana seguirán la discusión en la paritaria.
Sobre la cuestión de fondo, definió la ley votada como “un antecedente positivo”. “Estamos de acuerdo; amplía los derechos de los trabajadores. En los países avanzados -comentó-, las licencias son hasta de un año. Porque los niños atendidos por sus padres fortalecen los lazos familiares y mejora su situación emocional. Esto no es una cuestión corporativa (de las mujeres) -aclaró-; es un bien para toda la sociedad. Además, hoy se ha reconfigurado la familia y muchas veces no hay una persona que pueda hacerse cargo del niño. Entonces, ésta es una manera de defender la infancia”, concluyó Alesso, y recordó que ya hay provincias argentinas que poseen este régimen, como Córdoba y Tierra del Fuego.