Luego de los anuncios realizados el viernes por la noche, el gobierno inició un fin de semana de febriles contactos en busca de la ayuda necesaria para impulsar los cambios, tranquilizar a los mercados y enviar una buena señal al Fondo Monetario Internacional.

Al cierre de esta edición, Fernando De la Rúa se encontraba reunido con los gobernadores peronistas. Antes estuvo con los de la Alianza y ayer consiguió respaldo internacional, mantuvo reuniones con diputados aliancistas, del peronismo, el cavallismo y los partidos provinciales.

El gobernador Carlos Reutemann adelantó esta mañana, antes de llegar a Olivos, que no se encuentra en condiciones de firmar compromisos con la Nación para los próximos cinco años -tal como lo pidió el presidente- porque su mandato finaliza en 2003 y en Santa Fe no existe la posibilidad de la reelección.

Para el gobierno, el apoyo del peronismo resulta fundamental porque incluso desde el exterior, se observa con detenimiento hasta qué punto las medidas consiguen el consenso necesario para ser llevadas adelante.

Antes de ingresar a la reunión con De la Rúa, el gobernador santacruceño Néstor Kirchner (PJ), calificó como "absolutamente fundamentalistas" y "agraviantes" las declaraciones del ministro de Economía, José Luis Machinea, que planteó las medidas anunciadas como una disyuntiva de "ésto o el caos". (Más información en POLITICA).