Opinión: OPIN-03

Cartas a la Dirección

íAy, Aguas!


Señores directores: Transcurridos cinco años de la privatización del servicio de agua y cloacas de la provincia de Santa Fe y luego de dos renegociaciones contractuales, dos suspensiones de los planes de expansión, un aumento del 13,2% del valor del metro cúbico de agua, para que todos los usuarios subvencionemos dichas obras de expansión (que ahora sabemos no se van a efectuar por cuatro años), no desesperemos, existen por suerte buenas nuevas. íSe ha firmado el preacuerdo!

Con el cansancio reflejado en sus rostros y voz levemente disfónica, fruto de agotadoras jornadas de trabajo y acaloradas discusiones, los funcionarios del Estado y de la empresa se han encargado de explicarnos el muy ecuánime y satisfactorio preacuerdo de re-renegociación al que han arribado.

Es de este modo que habiendo escuchado la voz del pueblo, que les pedía encarecidamente que "no" ejecuten nuevas obras, han consensuado una solución que, económicamente neutra, posibilita que la tarifa aumente "recién" dentro de cinco años, y como si esto fuera poco "faculta a los municipios, entidades vecinales, vecinos en general, sociedades de fomento, entidades intermedias", etc. y toda otra posibilidad que se nos ocurra (se escuchan ofertas) a efectuar las obras de agua y cloacas que la concesionaria no puede realizar.

Por lo tanto ciudadanos santafesinos llenémonos de gozo, en los primeros días del año 2001 se han producido dos actos del poder divino, superior al orden natural y a las fuerzas humanas.

El primero de ellos es de índole puramente matemática y trae como consecuencia que una fórmula polinómica, donde el monomio de mayor incidencia se hace cero, sigue después de esto obcecadamente arrojando exactamente el mismo valor, lo que nos asegura la tan mentada y pregonada neutralidad.

El segundo de ellos y el de mayor trascendencia es de índole social, y trae como consecuencia que las obras que la concesionaria del servicio y su operadora internacional asociada no pueden concretar, sí pueden ser financiadas y efectuadas por los municipios, asociaciones vecinales, etc., y a un costo inferior.

En efecto, debemos estar orgullosos y henchir el pecho, en la invencible, los municipios, asociaciones vecinales...etc., tienen tanta eficacia y eficiencia que pueden sustituir, superando en sus funciones y aun con menores costos a una de por sí eficaz y eficiente empresa privada. Por lo cual, gracias a esta interesante experiencia -globalización mediante- en algunos años más podrán estar efectuando obras de saneamiento en distintos puntos del planeta.

En virtud de esto les digo a los nostálgicos del progreso, que se resisten a seguir viviendo sin estos servicios suntuarios, organícense y construyan sus obras, que por sus obras los conocerán, y al resto que no cuenta con agua ni cloacas respire profundo, por cuatro años no va a recibir una nueva factura. Luis Lombó. 13.377.793. Esperanza.