Señores directores: El 29 de marzo del cte., el director de Canal Familiar me manifestó, intempestivamente, que mi programa periodístico "Lo que vendrá", que debía comenzar a emitirse en vivo los miércoles de 22 a 23, a partir del 4 de abril por ese canal televisivo, no podía salir al aire.

La razones invocadas aludían a "presiones" recibidas, originadas en quienes "no quieren un programa de opinión en este canal". Ante mis preguntas intentando conocer de dónde provenían esas "presiones", el directivo hizo mención a quienes "manejan la televisión de Santa Fe". Pregunté quiénes eran, y se me respondió que "no tienen rostro".

Un nuevo programa local, realizado en Santa Fe por santafesinos, para analizar los hechos de la realidad provincial y nacional desde nuestra óptica, con invitados que representaran el arco pluralista de todas las posiciones políticas, y con total libertad de expresión e independencia, no podrá realizarse. Alguien, desde las sombras, lo impide.

¿Quiénes usan estas prácticas para conculcar libertades constitucionales? ¿Qué monopolio puede "eliminar" de un plumazo la libre competencia? ¿Qué facción antidemocrática puede ejercer censura previa? ¿Quiénes gozan de tanta impunidad como para "presionar" amedrentando y coaccionando?

He sido víctima de una clara discriminación, que lesiona el ejercicio de la libertad de prensa y conculca mi derecho constitucional a expresar mis ideas libremente. Porque eso es, en definitiva, impedirme conducir un programa de opinión.

Quienes por acción u omisión se conviertan en cómplices de estas prácticas gangsteriles cargarán sobre sus conciencias el peso de sus culpas. Lo que realmente importa es saber si Santa Fe goza de libertad de prensa, o si nos hemos convertido en otra Chicago, donde las mafias imponen sus medios de difusión y sus periodistas. Dr. Carlos J. Rodríguez. Ciudad.

Señores directores: Perdí mi carné de jubilado para viajar en ómnibus. íQué suerte! Ruego al que lo encuentre me lo devuelva y no trate de usarlo, porque pagará el doble por usarlo dos veces.

íNo puede ser! Les demostraré matemáticamente que sí. Para obtenerlo hay que ser jubilado de mínima, tener más de 70 años, sacar una foto nueva, hacer una larga cola para dar los datos, fotocopias, etc., y otra, para retirarlo. Ahora soy un ciudadano común, tengo boleto de combinación para 2 viajes. Ejemplo: tomo el 9 en el centro, me bajo y tomo el 16 por sólo $ 0.85. Antes, como jubilado, no tenía combinación y tenía que pagar dos boletos de $ 0.45, es decir, un total de $ 0,90 (5 guitas más), es decir, 100 % de aumento.

Invito a mis colegas de sufrimiento y supervivencia a tirar el carné o guardarlo como un amargo recuerdo. íAlbricias, soy ahora una persona común y me siento mejor tratado y no discriminado!

Para terminar, digo con palabras del insigne poeta francés Prevert: "Alguna vez todas las personas serán de tamaño natural y nadie nunca más será humillado". Martín Molinas. LE: 3.335.529. Ciudad.