Deportes: DEPO-09

Ecos de la resonante actuación
de la selección Sub 15 de hockey

Consiguieron un subcampeonato nacional histórico para Santa Fe. El Sub 15 femenino de Santa Fe obtuvo el subcampeonato nacional en Mendoza. Es la historia de un grupo unido que antepuso su esfuerzo y ganas a todo.


La actuación superó cualquier tipo de expectativas. Claro, Santa Fe no está acostumbrado a disputar finales de Campeonatos Nacionales. Si bien los que vimos cómo trabajaron y se sacrificaron estas chicas les teníamos mucha confianza; ellas se encargaron de demostrar en la cancha todo lo que pueden y quieren.

La entrenadora, Natalia Morello, en diálogo con El Litoral, afirmó que "mejoraron muchísimo desde que comenzamos a trabajar. Quizás no estaba en los planes llegar a disputar la final, pero a medida que pasaban los partidos, nuestra confianza aumentaba y pensábamos que podíamos llegar a cosas mayores. Jugaron muy bien y tienen potencial para desarrollar en el futuro, siempre y cuando cuenten con la cancha sintética".

De menor a mayor


"En el primer partido con La Pampa las chicas estaban nerviosas, no les salía nada, se les trababa el palo, daban mal los pases. El primer tiempo fue para olvidar, pero en el segundo se soltaron y ganamos 3 a 1", explicó Natalia.

Junto a sus colaboradoras, María de los Angeles Tur y Guillermina Veloso, explicaron que el nivel fue creciendo con el transcurrir de los partidos. "En el segundo, con San Rafael nos pusimos rápidamente 2 a 0 arriba, pintaba para una goleada, se relajaron y terminamos sin hacer más goles, quizás porque ya pensaron que la clasificación estaba asegurada. Luego vino Mendoza. Las chicas jugaron muy bien y respetaron la táctica planteada con cuatro volantes. Le hicimos un golazo de corto, Mendoza se desesperó y sobre la hora tuvieron diez cortos seguidos hasta que nos empataron".

Seguidamente vino el cruce con Bahía Blanca "y si bien no pudimos definir rápido aunque tuvimos muchas ocasiones, este partido estuvo relativamente controlado. Atacamos nosotras el 80 por ciento, llegamos al gol y pasamos a semifinales".

"Luego vino la semifinal con Mar del Plata, un poco más difícil que los encuentros anteriores. Nos atacaron bastante, el equipo funcionó bien y aprovechamos el momento justo para marcar la diferencia", afirmaron.

"Llegamos invictos a la final, con Mendoza, el local y todo lo que ello significaba. Ya habíamos protagonizado un partido muy parejo en la ronda clasificatoria. Sabíamos que sería durísimo, empezamos 0-2 abajo y no teníamos muchas esperanzas. Pero las chicas remontaron, se cayeron las mendocinas nos pusimos 1-2, después 2-2 y a ellas se les complicó el panorama. Estaban súper nerviosas y de última nos hicieron un golazo de corner corto cuando faltaban cinco minutos".

Mal los árbitros


Las entrenadoras pusieron de manifiesto que el nivel demostrado por los árbitros no fue muy bueno.

"Tuvimos algunos problemas. No es que perdimos por culpa de ellos, pero tuvieron actitudes que no se pueden dejar pasar y se lo hicimos saber", enfatizaron.

Las jugadoras fueron las encargadas de denunciar que se "equivocaron" mucho a favor de las locales, dieron vuelta muchos fallos y hasta no paraban el reloj cuando las locales festejaban largamente sus goles.

Lo mejor: el grupo humano


"Sin dudas que lo que hay que destacar es el grupo humano espectacular que conformaron. Se hicieron muy amigas y tuvieron muy buena onda con todo el cuerpo técnico. Eso las llevó a creer en ellas mismas, que podían. Se mostraron dentro de la cancha como son fuera de ella. Pusieron mucha garra, actitud, seguridad y confiaron en la capacidad de sus compañeras.

"En lo técnico se mejoró muchísimo, jugaron muy bien. Las pequeñas cositas que corregíamos en cada entrenamiento llevaron a superar la falta de la cancha sintética para entrenar. Jugaban jueguitos donde no se podía levantar el palo, no se podía pegar... era todo prohibido, entonces se acostumbraron a la fuerza al juego que yo quería que hagan y que salgan jugando como en sintético. Si tuvieran sintético podrían rendir mucho más", dijo Natalia Morello.

"Ellas fueron las protagonistas"


"Para mí fue un desafío muy grande, me impactó mucho. De dirigir equipos en GER, pasar a un seleccionado fue un salto muy grande. José Luis Oro me apoyó siempre; me decía que haga lo mismo que en el club, me respaldó totalmente", dijo la entrenadora.

"Todo lo hicieron las chicas, nosotras solamente acomodábamos las cosas. El mérito es de ellas. Les ayudamos a corregir algo, pero ellas entraron a la cancha y pusieron todo".

Sólo falta el sintético


Tanto María de los Angeles Tur como Guillermina Veloso, las colaboradoras de la entrenadora, junto al profesor Daniel Falco, manifestaron que la prioridad de aquí en más debe ser instalar el sintético y seguir trabajando como hasta ahora.

Para "Guille" Veloso "el nivel del grupo fue excelente. Me pareció algo nuevo ver un Nacional desde este lado, si bien yo ya estuve con los varones. Con las chicas fue diferente... hermoso. Santa Fe tiene mucho potencial, sólo falta el sintético. Si seguimos trabajando como ahora vamos a lograr muchas cosas y en el futuro nos va a ir muy bien. Hay que seguir para adelante siempre".

Por su parte, "Meri" Tur aprovechó para recalcarles a las chicas que "lo que lograron es fantástico. Formaron un grupo que se bancó todo. Algunas jugaron poco, otras mucho, pero nunca tuvieron actitudes negativas entre ellas, por el contrario, siempre se apoyaron. Se tuvieron un respeto muy grande y eso fue la base para llegar a una final. Lograron algo sin precedentes; que lo disfruten porque se lo merecen. Se tuvieron que adaptar a muchas cosas, pusieron esfuerzo, tuvieron confianza en ellas mismas y una mentalidad que muchas veces las más grandes no tenemos, y que no nos enseñan a tener".

Sin miedo


Finalmente, Natalia Morello hizo hincapié en que ella como jugadora, representando a Rosario, notó que hay equipos que cuando entran a la cancha las miran como pidiéndoles por favor que no les hagan muchos goles.

"Justamente, esa actitud, este equipo logró cambiarla y enfrentar sin miedo a cualquiera. En la final tuvimos el público en contra, gente que les gritaba y las hostigaba. Los árbitros cobraron muy mal, pero ellas siguieron luchando, concentradas y dieron un verdadero ejemplo".

Luis Gudiño