El senador Antonio Cafiero (PJ) ratificó su propuesta para que el Congreso nombre un nuevo Jefe de Gabinete, a sugerencia del Ejecutivo, y deslizó que ese cargo podría ser ocupado por referentes peronistas como Carlos Ruckauf, José Manuel de la Sota, Eduardo Duhalde, Adolfo Rodríguez Saá, o por el propio titular de la UCR, Raúl Alfonsín.

Sin embargo, el veterano legislador negó de plano que en sus controvertidas declaraciones de ayer, cuando habló de la debilidad del gobierno, estuviera apostando a la irrupción del mandato presidencial, y lamentó que el vocero Juan Pablo Baylac, quien lo criticó duramente, "haya agarrado por el lado de los tomates".

"Yo en ningún momento he querido desacreditar la figura del presidente (Fernando de la Rúa) ni nada por el estilo", aclaró Cafiero, luego de que Baylac acusara al senador peronista de realizar afirmaciones con un "tufillo golpista".

El legislador bonaerense sostuvo que "hay que preservar a toda costa el actual régimen constitucional y dejar de lado todas esas fantasías que hablan de una elección anticipada o de que se vaya el gobierno".

Cafiero precisó que cuando ayer afirmó a una radio porteña que "si hubiera en el país un destacamento de bomberos con alguna fuerza, se caería el gobierno constitucional", estaba haciendo una referencia al pasado y volvió a subrayar que "hoy no es posible. El orden constitucional hay que preservarlo".

Sin embargo, Cafiero confirmó su propuesta sobre la conveniencia, a su juicio, de que el presidente sugiriera al Parlamento el nombre de un nuevo jefe de Gabinete, en reemplazo de Crhystian Colombo.

"Yo dije que el presidente de la República tiene a mano un instrumento muy poderoso para satisfacer estos reclamos constantes que recibe adentro y fuera del país, sin necesidad de interrumpir el mandato o sin violar la Constitución", enfatizó.

Cafiero recordó que cuando se creó en la Constitución "la figura del jefe de Gabinete no era para hacer de éste un ministro más, sino para crear una figura política institucional para el caso de que el presidente quisiera imprimir un cambio drástico o profundo en su gestión".

Incluso, el senador se pronunció a favor de que el gobierno someta esta eventual iniciativa a "una consulta popular: esto puede hacerse en 30 ó 60 días y tendríamos muy legitimada -dijo- la figura de un primer ministro o de un jefe de Gabinete". Ese instrumento, insistió, significa darle al primer mandatario la posibilidad de "cambiar al jefe de Gabinete y armar una nueva estructura y un nuevo plan de gobierno, si las cosas le van mal". Cuando se le preguntó quiénes, a su criterio, podrían ocupar ese puesto, Cafiero se autoexcluyó expresamente y señaló: "Hay otros hombres: Duhalde, Ruckauf, De la Sota, el mismo Rodríguez Saá. Tenemos en el peronismo ocho o diez hombres de suficiente estatura política como para encarnar esos cargos. Y lo mismo puede haber en el radicalismo. Yo le voy a tirar un nombre que va a provocar seguramente sorpresa: ¿y por qué no el propio Alfonsín?", se preguntó.