Internacionales: INTE-04

Primer golpe a la reunión de Bonn

El representante de la etnia pashtún pegó el portazo y abandonó las conversaciones. Los pashtún conforman el grupo mayoritario entre el pueblo afgano. De todos modos la conferencia continúa y los organizadores se muestran optimistas.


Las tensiones étnicas surgieron en las conversaciones sobre el futuro gobierno de Afganistán que se desarrollan en Bonn, Alemania, justamente cuando la conferencia comenzaba a elegir los nombres de los líderes que compartirían el poder en un gobierno posterior a los Talibán.

Haji Abdul Qadir, el delegado pashtún de más alto rango en las conversaciones, se marchó, aparentemente en protesta por la falta de representación de su grupo étnico en las discusiones. Dio un portazo debido a "importantes divergencias" con los otros miembros de su delegación, según una fuente diplomática que pidió el anonimato.

A pesar de todo, la ONU esperaba lograr un "acuerdo en principio" durante la jornada de hoy sobre la transición política y el mantenimiento de la seguridad en Afganistán.

Con respecto a la ida del dirigente pashtún, una fuente dijo que "no estaba satisfecho con la composición de su propio grupo". La Alianza del Norte agrupa principalmente a etnias minoritarias (uzbekos, tayikos y hazaras) y deja una escasa importancia a la etnia pashtún, la más importante de Afganistán.

"Lamentamos verlo partir y esperamos verlo participar en cualquier nueva administración en Afganistán", declaró, por su parte, Ahmad Fawzi, portavoz del representante especial de la ONU para Afganistán, Lajtar Brahimi.

"Pero el trabajo tiene que continuar" en Bonn, agregó el vocero de la ONU, que auspicia la conferencia. "Y está continuando".

Según la fuente diplomática, la partida de Qadir "no afecta los progresos en las negociaciones" en curso, que se centraban hoy sobre la composición de una nueva administración interina (ejecutivo), de entre 12 y 15 miembros, y de un Consejo Supremo interino (legislativo), de entre 120 y 200 miembros.

Las negociaciones se prolongaron durante toda la noche. Cada delegación elaboró una lista de nombres para la autoridad interina, según un responsable de la Unión Europea, que pidió el anonimato.

Según un diplomático que presenció la negociaciones en Petersberg, una lujosa residencia ubicada a unos kilómetros de Bonn, todo el mundo no había acabado la preparación de su lista.

"Terminamos nuestra lista (para el Consejo), pero la de la Alianza del Norte todavía no lo está porque tienen que consultar Kabul", explicó Hamid Sidiq, consejero del grupo del ex rey Zahir Sha, depuesto en 1973.

Según una fuente diplomática, las tensiones en el seno de la Alianza del Norte representan "una de las amenazas más serias" sobre la conferencia.

La influencia de los dirigentes de la Alianza del Norte, que se quedaron en Kabul, pesa sobre la evolución de la conferencia, según una fuente diplomática. El presidente afgano Burhanuddin Rabbani "llama por momentos cada dos horas" a Yunis Qanuni, el líder de la delegación en Bonn.

La conferencia interafgana de Bonn se inició el pasado martes en presencia de cuatro delegaciones: la Alianza del Norte, que tomó Kabul el pasado 13 de noviembre, el grupo de Roma, de los partidarios de Zahir Sha, el grupo de Chipre, considerado cercano a Irán, y el de Peshawar, apoyado por Pakistán. (DyN/AFP).

Destacan el rol de Argentina


El embajador de Estados Unidos, James Walsh, destacó anoche el rol de la Argentina después de los atentados terroristas del 11 de setiembre en New York y Washington, al calificar como "extremadamente generosa" la oferta de ayuda humanitaria y asistencia en la preservación de la paz.

En el marco de la cena organizada por la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa), Walsh sostuvo que la Argentina se convirtió en un "estrecho socio" de Estados Unidos en la lucha contra el terrorismo internacional y, en tal sentido, señaló que fue "clave en la acción preliminar" desarrollada en la OEA y en la implementación del Tratado de Río.

El funcionario estadounidense afirmó además que la Argentina tuvo "una activa participación en el intercambio de información", luego de los trágicos atentados y un "decidido apoyo" brindado por el gobierno en la "batalla diplomática" contra el terrorismo.

El embajador elogió el "activo rol" de la Argentina en la implementación de "medidas financieras" y de "seguridad" tomadas contra la organización Al Qaeda y otros grupos terroristas.

El titular de Adepa, Claudio Escribano, manifestó por su parte el "acompañamiento activo" para con Estados Unidos y su pueblo de parte de la entidad periodística, luego de los trágicos atentados.

"Sabemos que no somos una potencia militar, pero también sabemos que en estas circunstancias es cuando se prueba la talla de las lealtades", expresó Escribano durante la comida que se realizó en un hotel céntrico de Buenos Aires. (DyN).