Rosario (C).- Los últimos registros estadísticos judiciales y policiales indican un exasperado aumento del robo de automotores en las calles de Rosario. En abril pasado, el número de vehículos sustraídos duplicó la cifra del mismo mes de 2001. En los primeros cuatro meses de 2002, este tipo de ilícitos ya excedió los guarismos del primer semestre del año pasado. Un promedio alarmante, que indica que entre tres y cuatro propietarios pierden cada día su automóvil.

Las causas del recrudecimiento de este fenómeno son múltiples. Pero una significativa está planteada por el importante aumento de las piezas en el mercado formal de autopartes. Según la policía, ese encarecimiento reimpulsó el robo destinado al desguace, que habilita una oferta más barata de partes y repuestos, en el circuito clandestino. Otro destino es la duplicación de vehículos o, como se conoce, la creación de autos mellizos. Es mucho menor, aunque existe, la finalidad de la sustracción para venderlos en el exterior, especialmente en Paraguay.

En abril de 2002 en la ciudad de Rosario se denunciaron 100 vehículos como robados, mientras que en ese mes, en 2001, la cifra fue de 55. Si la tendencia de los primeros cuatro meses del año se mantiene hacia su finalización, se registrará un aumento del 56 por ciento de los casos de robo respecto a 2001. En los Tribunales provinciales, figura que en los últimos dos cuatrimestres (septiembre/diciembre 2001 y enero/abril 2002) hubo 720 robos de autos. Eso es casi la cifra total de todo el año 2001 -es decir tres cuatrimestres- cuando se reportaron 729 robos.

En 2000 hubo 727 casos de sustracción y 306 -el 42 por ciento- fueron recuperados por la policía. De los 729 robos del 2001 se encontraron 172, el 23,6 por ciento. De los 381 robados hasta el 28 de abril pasado, se recuperaron 125: el 33,8 por ciento del total. Estos son guarismos aportados por la sección Sustracción de Automotores de la Unidad Regional II.

Las preferencias a la hora de escoger los modelos y las motivaciones de los ladrones cambiaron. Una cuestión significativa es cómo creció la sustracción de vehículos equipados con gas debido al aumento exasperado de los combustibles. Otra cuestión interesante es que los modelos últimos o los más costosos ya no son los más robados, debido a la tecnología de seguridad incorporada, que los hace menos vulnerables. Por eso, los autos más robados son modelos que tienen entre 3 y 7 años de antigüedad.

La crisis también impulsó los casos de autorrobo. En este punto, la policía encuadra a algunos propietarios de planes de inversión que fueron adjudicados y que, merced al encarecimiento de las cuotas, no pueden afrontar los pagos. En algunos casos realizan falsas denuncias para cobrar el seguro.