La suspensión hasta el miércoles de los bancos Bisel y Suquía, sumada a la incertidumbre por el futuro de ambas entidades, recorrió como un espectro helado los ámbitos regionales de comercialización de granos.

El golpe se sintió pesadamente en la Bolsa de Comercio de Rosario, donde se cierran las principales operaciones de compraventa de cereal. La conmoción es fuerte porque el 90 % de las negociaciones se cancelan allí a través del Bisel, que tiene incluso una sucursal dentro de la institución. Y porque en plena temporada de cosecha de soja la paralización de estos bancos supone un freno a la actividad cerealera en el momento clave.

Pero el impacto regional es tremendo. Según comentó a El Litoral el titular de la Bolsa rosarina, Federico Boglione, la suspensión de estos bancos implica que haya, en la región centro, un volumen de entre 300 y 400 millones de pesos retenidos en transferencias bancarias emitidas entre el jueves y el viernes pasado.

``Esto para el campo es dramático. En nuestra zona el 95 % de la liquidación de las exportaciones granarias se realiza a través del Bisel. Eso permite a su vez la transferencia de fondos a los acopiadores de cereal y de los productores. Sin movimiento de dinero los problemas se multiplican porque, al no cobrar el productor, tampoco se puede pagar la trilla ni los fletes. Colapsa absolutamente toda la cadena productiva'', sintetizó Boglione.

Para el presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario, el paisaje se agrava porque además de las transferencias están parados las gestiones de cobro de cheques y valores en las entidades suspendidas.

Boglione resaltó otra preocupación. ``Para poder depositar los reintegros del IVA a los productores, que implica el 9 % del monto de las operaciones, se debe gestionar una clave bancaria única (CBU) nueva y eso demora 40 días. No se puede esperar ese tiempo en plena campaña. Sería un tremendo colapso'', subrayó.

En Chabás, a 40 kilómetros de Rosario, se reunirán esta tarde los presidentes comunales para tratar la afectación en el sur santafesino de los bancos suspendidos en plena temporada de cosecha. (Corresponsalía Rosario).

Al cierre de esta edición, se estaba llevando a cabo en la Casa Central del Banco de la Nación una reunión plenaria de su directorio, incluyendo al presidente, Horacio Pericoli, para analizar el alcance de la gestión que cumplirá la entidad respecto de los bancos Bisel, Suquía y Bersa. En otras palabras debía definirse si se trataría de una administración o de intervención.

El ministro de la Producción santafesino, Ricardo Fragueyro, que tenía previsto por otro tema un encuentro en dicho banco, aprovechó la ocasión para conversar con algunos directores del Nación y plantearle la preocupación del gobierno provincial para que se normalizara lo antes posible la actividad de las entidades suspendidas.

Fragueyro insistió ante las autoridades del Nación sobre la importancia que el Bisel, Suquía y Bersa -principalmente de los dos primeros- tienen en la operatoria de los sectores agropecuarios de la región Centro, pero no obtuvo ninguna respuesta, en razón de que todos los aspectos referidos al carácter de la gestión, como de los pasos instrumentales pertinentes, iban a ser definidos en la reunión que estaba teniendo lugar.

En tanto, en fuentes gerenciales del Suquía se informó que estaban recibiendo instrucciones para que se ordenaran las cosas a fin de abrir con normalidad, el miércoles, todas las sucursales.