Opinión: OPIN-08 Cartas a la dirección

Computación


Señores directores: Desde hace casi un año tengo una computadora Windows 1995 y una impresora. Y desde el principio, con la ayuda de mis hijos me desempeñé bastante bien para escribir ("documentos") ya que sabía escribir a máquina o sea que sé manejar las letras y los números.

Pero lo que en tanto tiempo no he aprendido es para qué sirven las demás teclas. Por ejemplo, arriba hay 12 teclas "F", numeradas del 1 al 12. Y alrededor hay 20 teclas más, de las que sólo conozco las 4 flechitas y "Supr-Inicio-Fin". Tengo un "Manual Windows 95", un "Microsof Word 97" (de éste no entiendo ni el título ni nada de lo que dice adentro), aunque está en castellano para mí es como si estuviera en chino.

Las palabras "Tabla", "Ventana" (¿de una habitación?) Los términos "Cursor", "Las fuentes se miden en puntos", "Utilizar Backup", etc., no los entiendo. Y peor cuando las palabras están en inglés, que son muchísimas. Tendrían que tener la traducción porque los lectores no tienen obligación de saber inglés.

Leo "El Litoral.com" de la primera serie: y la 2a. "Escritorio", "Explorador de Windows", "Sistema operativo", etc., y la 2a. serie "El Racó del clip", etc.

Pero lo que me interesaría y desearía ustedes tomaran en cuenta para ver si es posible, empezar por el principio y explicar para qué sirven las teclas de la computadora, salvo por supuesto las iguales a las de las máquinas de escribir que uno tiene que conocer de antemano. Hago notar, que una hija que hace años trabaja con computadoras y actualmente está haciendo un curso superior, me pide le guarde los "El Litoral.com" ya que donde estudia le han dicho que es muy conveniente que los lea. O sea, que son instructivas para los estudiantes de curso superior, pero también tendrían que ocuparse de los que recién empiezan. Raúl A. Villarroel. Ciudad.

Sin juicio


Señores directores: Cuando Jorge Luis Borges, a principios de 1976 declaró que estábamos siendo gobernados por el hampa, rufianes y tahúres, con esa claridad conceptual que sólo anida en las conciencias de los hombres íntegros y honestos, nos advertía a los argentinos de los peligros a los cuales estábamos expuestos en manos de políticos transformados en hampones y rufianes de su propio pueblo.

El 11 de octubre de 2002, cuando los representantes del pueblo de nuestra Nación anularon cualquier iniciativa de hacer un juicio político a los integrantes de la Suprema Corte de Justicia por sus actos de felonía y contumacia, será recordado a futuro como el día de la indignidad nacional.

Ese día el recuerdo de Borges sobrevoló el Congreso. Lo más impresionante de lo que está ocurriendo actualmente en la Argentina es que, con casi tres décadas de anticipación, un poeta anciano y ciego nos advirtió que nuestro país iba a ser gobernado por integrantes del crimen organizado como sistema político de gobierno. Ricardo Carreño. DNI. 4.283.845. Ciudad.