Pantallas y Escenarios: PAN-03 El primer escalón la fama: miles de jóvenes para un programa de televisión
Formaron filas de hasta diez cuadras para una selección de cantantes. Están inspirados por Bandana y Mambrú.


Miles de jóvenes hicieron filas de hasta diez cuadras para entrar al Teatro Gran Rex de la Capital Federal con el fin de participar de un casting de cantantes que intervendrán en un programa de televisión.

Desde la madrugada de ayer, los jóvenes hicieron colas para ganarse un lugar, pero la convocatoria sorprendió a los propios organizadores y productores del casting, ya que, aseguran, superó a la de Pop Stars.

Para intervenir en Escalera a la Fama, fueron más chicos y chicas que los que se presentaron para las elecciones de las que surgieron los hoy taquilleros Bandana y Mambrú.

El productor Gustavo Yankelevich adelantó que la intención es "elegir a un cantante y a una cantante", y se mostró sorprendido con la convocatoria.

"Lo hemos hecho ya con Pop Stars y lo hemos hecho con Mambrú y Bandana, pero esto es muy importante", señaló.

Un jurado los escucha


El animador del programa será Andy Kutnetzsoff, quien animó a los jóvenes desde el escenario de la sala, donde ingresaron los aspirantes con un cartelito con un número de cuatro cifras, identificatorio de cada uno de los turnos.

"Yo solamente hablo del programa, de la elección está el jurado, pero lo que me sorprende es la gente que vino, mucho más de la que me imaginaba", dijo el animador.

En el momento de la espera, algunos sacaron la guitarra y comenzaron a practicar en la mismísima vereda colmada de la avenida Corrientes, otros y otras despuntaban el vicio cantando a capela frente a cada micrófono que se acercaba.

Además de la incertidumbre por el resultado que vayan a obtener, hubo un momento de tensión cuando mientras los chicos aguardaban entrar al teatro una columna del Movimiento Territorial de Liberación (MTL) marchaba hacia la embajada de Bolivia, también sobre Corrientes, aunque los manifestantes no se detuvieron ni hubo contacto entre los dos sectores.

Una vez dentro, los jóvenes esperaron su turno en las butacas para enfrentarse a un jurado ante el que tuvieron que cantar y bailar.