La Plata y Buenos Aires.- La fiscal de La Plata María Scarpino pidió este mediodía la detención del chofer de un camión jaula aprehendido ayer, para indagarlo como sospechoso de tener participación directa en el accidente en el que murieron 14 personas en Lobos, al chocar una combi con un camión, informaron fuentes del caso.

El pedido de la fiscal deberá ser resuelto por el juez de garantías de La Plata Néstor de Aspro, en tanto, el chofer sospechado espera la resolución judicial en los tribunales de La Plata adonde fue trasladado esta mañana.

En el marco de la causa, son dos los testigos que ya ratificaron ante la Justicia haber visto cómo el camión jaula pudo tener un rol decisivo en el choque.

El chofer, arrestado en Saladillo y cuya identidad se mantiene en reserva, fue trasladado a las 7 de hoy a la fiscalía de María Scarpino, ubicada en 7 y 58 de La Plata.

La fiscal tenía hasta las 19 de hoy para pedirle al juez de garantías Néstor de Aspro que deje detenido al chofer para poder indagarlo, y al mediodía hizo efectiva la solicitud.

Una de las hipótesis principales del caso es que a las 5.30 de ayer, a ocho kilómetros de Lobos, un camión cargado con ganado pasó a un camión cerealero que circulaba en su mismo sentido.

Según la sospecha, este camión era el último de una caravana de otros tres rodados similares que se desplazaban distanciados por 200 metros cada uno hacia la localidad de Navarro.

"Cuando terminaba de pasar al camión cerealero de la empresa Rubio hermanos, el camión jaula fue advertido de frente por la combi de la empresa Villamil Viajes que iba en sentido contrario, de Junín hacia La Plata, y el rodado menor salió hacia la banquina", relató a Télam una fuente del caso.

Según esta línea de investigación, que tiene a su cargo la fiscal María Scarpino, "una vez que el camión jaula pasó, la combi salió desestabilizada desde la banquina y, por causas que se ignoran, se dirigió al carril contrario y chocó de frente con el camión cerealero".

Esta versión del hecho fue aportada por dos camioneros y sus respectivos acompañantes, quienes observaron lo ocurrido.

Estos testigos también fueron quienes tomaron la patente del camión jaula y la aportaron a la policía, que luego detuvo al camionero en la ciudad de Saladillo.

Por el choque murieron el chofer de la combi de la empresa Villamil Viajes, patente BOS 134, y los 13 pasajeros que la ocupaban, entre ellos, cuatro chicos.

Según la Policía bonaerense, las identidades de los 14 fallecidos son los niños Juan Bautista, Bernarda y Manuela Zabala y su madre Adriana Chacón, María José Rivas, Francina Suma, Fernanda Sus, María Laura y Cristina Mauricio, Raúl Vemero, Jéssica Paviz, Mónica Alori, Héctor Armendáriz y el chofer de la combi, Miguel Popino.

El único sobreviviente fue el chofer del camión cerealero a quien internaron en un hospital de La Plata.

En medio de un profundo pesar, eran inhumados este mediodía en las localidades bonaerenses de Junín, Gonnet y Ascensión los restos de la mayoría de las catorce víctimas fatales del accidente ocurrido en cercanías de Lobos.

En la ciudad de Junín, de donde eran oriundos siete de los fallecidos que viajaban en la combi que chocó frontalmente con un camión, fue sepultado a las 9.45 en el cementerio Parque Rosedal el cuerpo del chofer del vehículo siniestrado, Miguel Peppino, de 51 años.

En tanto a las 11, se realizaba el sepelio de María Fernanda Sus (24) en el cementerio central; y a las 12.15 el de Jéssica Pavez, (28, de nacionalidad chilena) en el cementerio Parque Rosedal.

El intendente de Junín, Abel Miguel, declaró duelo municipal para hoy, justo en el día que la ciudad debía festejar su santo, San Ignacio de Loyola.

Para la tarde, en tanto, estaban previstos los restantes cuatro sepelios.

A las 15 debía realizarse en el cementerio Parque Rosedal el de María José Rivas (18), quien era velada en la Asociación Mutual Supervisores Ferroviarios; a las 16 el de María Cristina Demichelli de Mauricio (58) y su hija Laura Mauricio (28) en el Cementerio del Oeste; y a las 16.30 el de Héctor Armendáriz (56) en el mismo lugar.

Embargados también por un profundo dolor, los familiares y allegados acompañaban a Eduardo Zabala, oriundo de la localidad de Gonnet, en el partido de La Plata, en el velatorio de su esposa Adriana Chacón (40) y sus tres hijos Juan Bautista (8), Bernarda (6) y Manuela (3), que murieron en el accidente.

La inhumación estaba prevista que se realice desde las 12 en el cementerio platense.

Finalmente, recibieron sepultura los cuerpos de las tres personas residentes en la localidad de Ascensión, del partido de General Arenales.

Se trata de Mónica Alori (43) y su hija Francina Summa (10), cuyos restos fueron velados en el colegio Nuestra Señora, ya que la mujer era profesora de inglés de esa institución y la nena era alumna, y luego inhumados en el cementerio local.

Los pobladores de la localidad de 5.000 habitantes acompañaban en silencio los restos mortales y aún no salían de la conmoción por la tragedia, que ya había golpeado hace pocos días en otro accidente de tránsito en el que murió un matrimonio joven muy conocido en la zona.

En tanto, se realizó también el sepelio de Raúl Venero (69), un productor agropecuario que hace unos años había perdido a su esposa en un hecho similar.

La víctima tenía tres hijos, una mujer radicada en Pilar y dos varones en La Plata, estos últimos a quienes justamente se disponía a visitar el hombre cuando emprendió el viaje en la combi de la empresa Villamil Turismo.(DyN y Télam).