Los productores lecheros, reunidos ayer en Buenos Aires, resolvieron agotar el diálogo con la industria antes de adoptar medidas de fuerza que profundicen el conflicto, que surgió desde que las usinas dispusieron una baja en el precio de la leche, y aceptaron reunirse con el Consejo Federal de Lechería, el próximo jueves en esta capital.

No obstante, y para mantener el espíritu del reclamo, los tamberos de las provincias de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos, Buenos Aires y La Pampa, iniciarán la semana que viene una ronda de asambleas frente a las industrias. "Será una primera protesta, aunque ello no signifique interrumpir las negociaciones para que se deje sin efecto la rebaja del precio", explicó a este diario un vocero de la Mesa Provincial de Productores.

Durante el encuentro de ayer, celebrado en la sede de Carbap, los dirigentes coincidieron en advertir que hay un sostenido reclamo de todos los productores por la baja de precio que en forma unilateral dispuso la industria, y expresaron su disconformidad por el reciente comentario de Osvaldo Capellini, del Centro de Industriales Lecheros (CIL), cuando dijo en Santa Fe que "no hay nada que negociar" y que "la baja es estacional".

En recientes asambleas realizadas en Rafaela, Suardi y Cañada Rosquín, los tamberos ratificaron su voluntad de diálogo pero anticiparon que están dispuestos a aplicar un plan de lucha si los industriales no dejan sin efecto los descuentos.