En honor al fútbol

Tévez, de Boca, y Luis González, de River, muestran su felicidad tras uno de los goles. Ambos se anotaron en la red colombiana. Foto: Agencia AFP.. 

Argentina tuvo una brillante actuación y se clasificó para la final de la Copa América 2004. Goleó a Colombia 3 a 0 con un juego vistoso y dominante.Así, la selección llega a un partido definitorio después de once años.

El seleccionado argentino se clasificó anoche finalista de la Copa América con una merecida goleada sobre el actual campeón, Colombia, por 3 a 0 ante unas 20 mil personas en el estadio Nacional de Lima.

El volante Carlos Tévez, como en la fase anterior ante Perú, inició el camino hacia la victoria con un gol de tiro libre a los 33 minutos del primer tiempo, mientras que Luis González amplió el marcador a los 5 del complemento y Juan Pablo Sorín lo selló a los 40.

De esta forma, Argentina sometió a Colombia en el día de su Independencia Nacional y se vengó de la derrota que le propinó su rival en un amistoso de preparación, en Miami, hace 20 días. Y Tévez también tuvo su revancha personal ante el arquero Juan Carlos Henao, quien le quitó la posibilidad de consagrarse campeón de la Copa Libertadores 2004 en la final que Once Caldas le ganó a Boca.

Argentina, después de su debut goleador ante Ecuador (6-1), jugó su mejor partido en el campeonato y, pese a las ausencias de jugadores clave, como Javier Saviola y Andrés D'Alessandro, quedó fortalecida para la final.

En esa instancia, programada para el domingo próximo a las 17 (hora de Buenos Aires), el conjunto de Marcelo Bielsa, que busca su primer título oficial, enfrentará al ganador de Brasil y Uruguay, que jugarán hoy a las 21.45 en el mismo escenario.

Claro dominio

Por predisposición en el campo, Argentina tomó la iniciativa del partido ante un rival que prefirió esperarlo en su propio terreno y contraatacar con la subida en bloque de Murillo, Patiño, Congo y Moreno.

Rápidamente, el conjunto de Marcelo Bielsa descubrió que por el sector derecho del ataque había facilidades y produjo sus primeras dos acciones antes del cuarto de hora inicial. A los 9 minutos, Zanetti protagonizó una de sus típicas escaladas y envió un centro que despejó Andrés Orozco al córner, y dos minutos después, César Delgado, tras combinar con Tévez, remató por encima del travesaño. El jugador de Boca cumplía en su función de estratega con velocidad en la transición hacia el ataque y precisión en las asistencias.

Argentina, al promediar la mitad del primer tiempo, dominaba claramente, merecía la ventaja, aunque penaba en alguna respuesta esporádica de los colombianos. Sobre los 24, el conjunto de Bielsa contó con la situación más riesgosa, cuando Andrés González despejó de cabeza en la línea de gol un remate de Cristian González, tras una falla de Henao en un centro de Delgado, quien desbordaba a su antojo por la derecha.

Tras aquella acción, Colombia ajustó las marcas y logró controlar parcialmente el desarrollo del partido, hasta que una aparición de Tévez hizo corresponder al resultado con la lógica. El volante recibió una pelota pocos metros antes de la medialuna del área, encaró, fue derribado bruscamente y ejecutó con maestría el consecuente tiro libre que sorprendió a contrapierna a Henao, después de pasar por afuera de la barrera.

El gol, acaso, llegó en el momento en que el juego argentino había perdido intensidad, pero fue merecido, porque Colombia no se decidió a atacar ni siquiera cuando tuvo las posibilidades de hacerlo. Toda la apatía que no había mostrado Colombia durante el torneo fue pagada al mayor costo ante un equipo con mucha determinación para el ataque.

Baile y goleada

El segundo gol argentino, a los 5 minutos del segundo tiempo, selló el pasaporte del primer finalista y resultó contraproducente para la estética del juego. Argentina ensayó un ataque por el costado izquierdo, el menos elegido, pero Figueroa llegó hasta el fondo, envió un centro atrás y Luis González, con la defensa desacomodada y el arquero batido, la empujó a la red.

Entonces, llegó el momento de cuidar la ventaja y conservar algunas figuras lesionadas y con posibilidades de ser suspendidas por doble amarilla. Rosales y Quiroga reemplazaron a Delgado y Figueroa, respectivamente, y el funcionamiento del equipo no sufrió variantes.

Antes del final, cuando Argentina jugaba a gusto con Colombia, presionando, a pesar de la ventaja en el campo visitante, Sorín marcó el tercero de cabeza, lo que significó la humillación para los colombianos, quienes renunciaron a toda posibilidad de revertir la historia cuando soportaron el segundo gol.

El resultado de la primera semifinal de la Copa América coincidió con los pronósticos previos, pero se manifestó con un margen mucho mayor al esperado. Y Colombia perdió el invicto y la chance de llegar a la final, que Argentina disfrutará después de once años.

Argentina 3 - Colombia 0

Estadio: Nacional de Lima.

Arbitro: Gilberto Hidalgo (Perú).

Argentina: Abbondanzieri; Zanetti, Coloccini, Heinze y Sorín; Luis González, Mascherano y Cristian González; Tévez; Delgado y Figueroa. Director técnico: Marcelo Bielsa.

Colombia: Henao; Martínez, Andrés González, Orozco y Victoria; Patiño, Aguilar, Oscar Díaz y Murillo; Moreno y Congo. Director técnico: Reinaldo Rueda.

Goles: en el primer tiempo, a los 33 min. Tévez (A); en el segundo tiempo, a los 5 min. Luis González (A) y a los 40 min. Sorín (A).

Cambios: en el segundo tiempo, a los 13 min. Viáfara por Aguilar (C), a los 16 min. Rosales por Delgado (A), a los 17 min. Perea por Murillo (C), a los 20 min. Quiroga por Figueroa (A), a los 29 min. Ferreira por Moreno (C) y a los 45 min. Placente por Cristian González (A).

Fuerza en contra

El entrenador brasileño Carlos Alberto Parreira afirmó ayer antes del cotejo semifinal que iba a hacer fuerza por Colombia en el partido contra Argentina, al tiempo que su asesor, Mario Zagallo, se declaró hincha de los colombianos "desde niño". "Hago fuerza por Colombia por razones obvias", sostuvo Parreira durante el entrenamiento de su equipo con vistas al partido frente Uruguay. En tanto, Zagallo apeló a la ironía para coincidir con Parreira al reiterar: "Soy hincha de Colombia desde niño".

Hace 11 años

Con el triunfo de ayer la selección argentina cortó una racha de once años sin jugar finales en certámenes oficiales. La última vez fue el 4 de julio de 1993, cuando venció a México 2 a 1 y se quedó con el título continental. Además, Argentina no le ganaba a Colombia en un partido por la Copa América desde 1991, en la rueda final de aquel certamen, donde logró un 2 a 1, con goles de Diego Simeone y Gabriel Batistuta. En 1999 cayó por 3 a 0 (con los históricos tres penales fallados por Palermo), y en 1993 empató dos veces: 1 a 1 y 0 a 0 (luego ganó 6 a 5 por penales).