Como todos los martes desde la catástrofe hídrica de abril de 2003, los integrantes de la Marcha de las Antorchas reclamaron "justicia en todo y para todos". Pero esta vez, la movilización, que habitualmente tiene lugar en plaza 25 de Mayo, se concretó frente a la Municipalidad.
Allí el pequeño grupo leyó un documento dirigido al intendente Martín Balbarrey, en el que le señalan que "formó parte en forma ininterrumpida de los gobiernos provincial y municipal, a través de distintos cargos desde 1987 hasta 1999 y, en la inundación de 2003, como concejal, no cumplió su obligación de resguardar a los ciudadanos, a pesar de sus conocimientos recabados como director provincial de Hidráulica y de secretario municipal de Asuntos Hídricos".
Recordaron luego que, "cuando asumió, se comprometió a liderar la reconstrucción de lo devastado por la inundación" y se preguntaron si "llama reconstrucción a los parches que se rompen a los 15 días, los socavones y rupturas de las calles y paseos públicos de la zona oeste".
La movilización se desarrolló sin incidentes ante un Palacio municipal custodiado -por dentro y por fuera- por agentes policiales.
El acto terminó con la lectura de la nómina de víctimas de la inundación, un minuto de silencio por ellas y las estrofas del Himno Nacional.
Reunión con Balbarrey
Integrantes de la Carpa Negra serán recibidos por el intendente Martín Balbarrey a fin de conocer en forma directa "su voluntad política para dar solución integral a todas las necesidades existentes" en los barrios inundados. El encuentro se concretará mañana a las 17 en el segundo piso del palacio municipal.
Además, la audiencia tiene por objetivo pedir que se convoque a una ronda de consulta para crear un espacio de "participación y concertación de los sujetos y las organizaciones de los barrios afectados" y para dar solución a los múltiples requerimientos de los nuevos barrios.