Kirchner criticó a dirigentes que quieren que nada cambie
Aludió a los "ilustres economistas de la ortodoxia neoliberal" que no ven que está bajando la pobreza, la desocupación y la indigencia. También cuestionó al internismo de los partidos políticos, que brinda un "espectáculo sombrío".

El presidente Néstor Kirchner denunció ayer en Río Gallegos que hay dirigentes que desde distintos arcos ideológicos "se juntan" para "frustrar la gobernabilidad del país".

En un acto realizado en el gimnasio de la escuela Industrial 4 de Río Gallegos, Kirchner embistió por segunda vez en el día contra los "ilustres economistas, entre comillas, de la ortodoxia neoliberal".

También apuntó a los dirigentes políticos por las peleas internas y sostuvo que dan "un espectáculo sombrío" en lugar de "tener la grandeza de trabajar fuertemente por el país".

"Cuando voy dando las batallas cotidianas, dando fuerza y cambiando el rumbo del país, tengo que enfrentarme por allí con aquellos que no quieren que cambie nada en la Argentina y quieren seguir con la vieja Argentina, y con aquellos que dicen que quieren que cambie todo, pero en el fondo no quieren que cambie nada y que se juntan en un hilo invisible desde un extremo y del otro para frustrar la gobernabilidad de este país", denunció.

DIAGNÓSTICOS DE "ECONOMISTAS"

El jefe del Estado dijo: "Vencimos todos los diagnósticos de los teóricos ilustres economistas, entre comillas, de la ortodoxia neoliberal que hoy no ven que está bajando la pobreza, la indigencia, el desempleo, que crece el país". Kirchner también criticó a "aquellos que desarmaron el país" para conformar "un país que dependa de los servicios y no de la industria".

"Voy a luchar palmo a palmo, con todas mis fuerzas, por las cosas que creo. Me siento con ganas, con fuerza, con coraje, con absoluta decisión para enfrentar todas las contingencias que demanda la Argentina de hoy", afirmó.

Kirchner aseguró que "no van a encontrar en mí un gobernante que baje los brazos. Cada vez que me los quieran hacer bajar los voy a subir diez veces más, porque sé que me los va a sostener el pueblo argentino".

"Vamos a seguir trabajando con todas nuestras fuerzas para avanzar todo lo que podamos hacer durante este tiempo. A mí solamente en este tiempo me toca ser presidente de los argentinos pero soy como siempre el Lupo, el Néstor, el vecino que siempre va a estar en esta ciudad junto a ustedes", expresó.

EN SANTA CRUZ

Kirchner afirmó que "día a día nos desvelamos y hoy encontramos una Argentina diferente, una Argentina que nos tocó tomarla prácticamente en llamas". Al resaltar el plan nacional de obra pública por más de 130 millones de pesos, sostuvo "que la inversión en obra pública está pensada para dinamizar la economía" y convocó a "pensar en una economía por encima de cualquier divisa partidaria".

En esa línea criticó las peleas partidarias, y aludió a "algunos dirigentes peleándose entre peronistas, radicales, socialistas, sin entender que esto se define meses antes de una elección".

"No tenemos que dar ese espectáculo sombrío; tenemos que tener la grandeza de trabajar fuertemente para el país; el que más responsabilidad tiene, más responsabilidad debe demostrar", añadió.

Más adelante llamó a apoyar al gobernador de Santa Cruz, Sergio Acevedo y al intendente de Río Gallegos, el radical Héctor Roquel. "Yo les pido de corazón, les pido el apoyo incondicional, el apoyo absolutamente solidario a mi amigo, el gobernador de Santa Cruz", enfatizó el presidente.

En el acto, Kirchner firmó documentación para el inicio de obra pública por un monto superior a los 130 millones de pesos. (Télam).