La policía apresó ayer a un temerario sujeto en momentos que escapaba por los techos de una finca donde terminaba de concretar un robo, en otro episodio que revela la situación por la que atraviesa la barriada de Guadalupe.

El rufián, cuenta con 33 años, y fue aprehendido por los uniformados a la altura de Espora al 500. El delincuente llevaba consigo una bicicleta, ropa de cama y prendas de vestir.

Más tarde se supo que estos elementos habían sido robados desde un inmueble ubicado en P. Cullen al 6900. Fuentes calificadas apuntaron que este ladrón no sería ajeno a otros episodios delictivos ocurridos en dicha jurisdicción.

En tanto agentes del Comando Radioeléctrico recuperaron una placa de bronce, la que había sido robada desde una plaza ubicada en 9 de Julio y Mariano Comas.

Todo comenzó cuando en López y Planes e Iturraspe los agentes decidieron interceptar el paso de un carro, que era tirado por un equino. En la cajuela del carro la policía halló una placa de bronce, de 50 x 35 cm., de homenaje a Facundo Zuviría.

Como consecuencia del procedimiento se arrestó a los ocupantes del carro que son un hombre de 27 años, otro de 25 y un menor, de 13, todos domiciliados en Barranquitas Oeste.

En tanto dos rufianes fueron puestos bajo doble llave tras ser sorprendidos robando en el interior de dos automóviles, estacionados en Espora al 2200.

Los sujetos son dos jóvenes, de 19 y 22 años, los que habían arremetido contra un Ford Fiesta y un Peugeot 206 estacionados en el citado lugar.

Anoche una oportuna intervención del Comando permitió atrapar a dos jovencitos, en el preciso instante en que disponían a asaltar a una anciana.

El hecho ocurrió en una finca de calle Mosconi al 1900 donde reside una jubilada. Los menores, de 14 y 17 años, fueron sorprendidos cuando estaban forzando la puerta de ingreso al inmueble. Ambos fueron conducidos detenidos a la seccional 2da.

Una pareja de turistas belga fue atacada a golpes al ser asaltada por delincuentes que le robaron dinero y objetos personales cuando caminaba por la zona nordeste de Paraná.

A raíz del ataque, cometido en inmediaciones del Museo Municipal del Mate, la pareja debió ser asistida en un hospital, ya que la mujer sufrió la fractura de un dedo y el hombre una lesión en un oído a raíz de un fuerte golpe.

Las fuentes identificaron a las víctimas como Anna Vamaelst y Mark Roweresht, de nacionalidad belga, quienes fueron interceptados cuando fotografiaban el gigantesco mate que reposa en una estructura de metal, ubicado próximo al túnel subfluvial que une a las ciudades de Paraná y Santa Fe.

Según la denuncia, los belgas fueron sorprendidos por tres delincuentes que, tras atacarlos a golpes frente a los peatones que caminaban por la zona, les robaron una importante suma en dólares, una cámara de fotos y los pasajes de regreso a su país, además de sus documentos.

Tras el asalto, la pareja fue trasladada al hospital San Martín, donde los médicos que la atendieron constataron que la mujer presentaba fractura del dedo anular derecho, aparentemente producida cuando uno de los ladrones le arrancó un anillo, y el hombre, un corte en el oído derecho, producto de un golpe.

Los asaltantes escaparon antes de que llegara la policía, por lo que eran intensamente buscados.