Preocupa la continuidad de una escuela inclusiva
Existe un rumor de cierre del establecimiento N° 884. La directora regional dijo que por ahora no hay una decisión tomada.

La Escuela N° 884 Ignacio Rodríguez, ubicada en Calcena 1100, está siendo evaluada por la Región IV de Educación en cuanto a su proyecto institucional y debido a la escasa matrícula que viene registrando. Este año la cantidad de alumnos fue bastante inferior a los 100.

El establecimiento público de EGB pasó de ser una escuela común a una de tipo inclusiva durante el 2003, es decir, que recibe a chicos con problemas de desarrollo psicomotriz y de aprendizaje. Es una de las pocas experiencias en este sentido que se realiza en la ciudad.

El cambio se debió básicamente a un intento de mantener abierto el establecimiento que, de a poco, fue perdiendo matrícula por estar rodeado de otras escuelas del barrio Melgarejo hacia donde se fueron inclinando los chicos de la zona. De todas formas, la transición a una experiencia curricular totalmente diferente no es fácil de aplicar y está bajo permanente observación ministerial.

Entre las preocupaciones figura el planteo de unos 30 docentes y no docentes que desarrollan tareas en la institución ante la posible pérdida de su puesto laboral. "Eso es algo totalmente infundado porque nadie se quedará sin trabajo", aseguró la directora escolar Estela Ferrón, quien ya inscribió a nuevos ingresantes para el ciclo 2005.

"Estoy más bien preocupada por brindarle a los alumnos de esa escuela la mejor propuesta educativa posible", dijo a El Litoral Ana Berraute, directora de la Región IV de Educación.

Consultada sobre el caso, llevó parcial tranquilidad a la comunidad escolar por cuanto "sólo estamos haciendo la evaluación que se realiza anualmente. Los distintos actores de la institución saben cuáles son las fortalezas y debilidades del proyecto, de modo que no debería haber otro motivo de preocupación".

Berraute aseguró que "no tenemos tomada ninguna posición", aunque "nada está deshechado", sentenció al ser interrogada por un posible cierre.

Se mostró más a favor de pensar en un "sistema educativo que vaya acompañando los cambios en la vida de la gente, del barrio", y no hacerlo sólo en términos de escuelas individuales.

En este sentido, recordó dos ejemplos: el de la escuela primaria Constituyentes que hoy se convirtió en un jardín de infantes y en un establecimiento medio, y el de la actual escuela Bustos donde antes funcionaba la Rivadavia.