Nuevos edificios conservan la imagen de la Santa Fe de ayer

La casa ubicada en bulevar Gálvez y Mitre representa -junto a otras lindantes- lo que fue la antigua traza de esa avenida "a la francesa". FOTO: GUILLERMO DI SALVATORE.. 

Se busca preservar la identidad, sin perder los orígenes. Viejas casonas que pertenecen al patrimonio de la ciudad son recicladas e integradas a modernos edificios, al menos, a través de sus fachadas.

Preservar las huellas de la historia y la identidad de una ciudad es algo que debe valorar su comunidad. Se trata de conservar los testimonios de cómo fue evolucionando -a nivel arquitectónico, por ejemplo- en sus distintas etapas de desarrollo, hasta consolidar su fisonomía actual.

Esta Santa Fe de la Vera Cruz parece que apuesta a esa premisa, que es cuidadosamente vigilada por la Comisión de Defensa del Patrimonio municipal, en especial si se trata de las construcciones de más de 80 años de antigüedad e integran su patrimonio histórico, según plantea la ordenanza 10.115.

En este último tiempo, en medio de la vorágine de inmuebles en construcción que se puede observar en nuestra ciudad, se pueden destacar algunas torres que no nos quitarán parte de esa historia.

Muchas de esas obras han conservado la fachada -o incluso, también las primeras habitaciones- de viejas casonas que dan testimonio de algún período histórico o alguna tendencia arquitectónica en la ciudad. Sus proyectos fueron evaluados por la Comisión de Defensa del Patrimonio, que estudia cada uno de estos casos en particular.

Un edificio con estas características, próximo a ser concluido, es el que se construyó en la esquina sudeste de bulevar Gálvez y Mitre. El presidente de dicha comisión, Rubén Martínez Ledesma, explicó que, en un primer momento, CAM había pensado en demoler esa casa, pero como está protegida por su antigüedad y tener similares características a otras ubicadas sobre el bulevar (que representan lo que fue la antigua traza de esa avenida "a la francesa"), se le pidió que se preservara y se presentaran alternativas a su proyecto.

De esta manera, la empresa constructora compró un terreno por calle Mitre y amplió esa propiedad horizontal, conservando en su totalidad ese solar. Gonzalo López, a cargo del área comercial de dicha firma, estimó que a principios de abril se terminará de reciclar esa casa, perteneciente al patrimonio histórico de la ciudad, que fue incorporada a la estructura del edificio.

Un caso similar se puede observar en el edificio construido por la empresa Pilay, donde funcionan sus oficinas, en San Martín y Corrientes. Para tal fin, restauró la antigua casa que perteneció a la familia Cullen y, por detrás, construyó una torre.

Otras iniciativas

Otros edificios que se están construyendo actualmente con estas características se ubican en 9 de Julio al 2900 y Obispo Gelabert al 2800, a cargo de las empresas Saux-Wernly y JB Construcciones, respectivamente.

En el primer caso, Eduardo Wernly, uno de los propietarios de la firma, explicó que la casa pertenecía al patrimonio de la ciudad. Y aunque estaba muy deteriorada, de todas maneras, se acordó con la Comisión de Patrimonio preservar su fachada.

En este sentido, el arquitecto Martínez Ledesma agregó que esta vivienda era un valioso ejemplo de la época del Art Noveau, pero tenía varias intervenciones anteriores que la habían deteriorado mucho. Por este motivo, sólo se conservó la fachada, que fue restaurada y forma una especie de atrio entre la línea de la fachada y el inicio del edificio, que está retirado por el histórico proyecto de ensanche de calle 9 de Julio. En el medio, se formó una especie de jardín interior.

Por su parte, el arquitecto Lisandro González, de la empresa JB Construcciones, comentó que -en el caso del otro edificio- su frente conserva las fachadas de dos casas idénticas, de 9 metros de ancho cada una, que habían sido construidas por el mismo dueño. A pesar de que no llegaban a tener más de 80 años de antigüedad, se acordó con la Comisión de Patrimonio preservar sus frentes y mantener la continuidad del frente del edificio, ya que en una de esas propiedades funciona el jardín de infantes de la UNL.

Por último, agregó que esta misma empresa constructora tiene previsto realizar un edificio de similares características en 4 de Enero al 2900, donde también se conservará la fachada de una antigua vivienda allí ubicada, pero también se incluirán las dos primeras habitaciones.