CLEMENTINA

"Sugiero que saque el Quini 6 y el Brinco del horario de Operación Triunfo, porque siempre todas las semanas pasa lo mismo y me lo pierdo".

ALFREDO, DE FOMENTO 9 DE JULIO

"Quiero hacer público mi reconocimiento al accionar de la Seccional 11ª de la Av. Aristóbulo del Valle por la rapidez con que actuaron ante mi llamado por un presunto hecho delictivo en calle Pedro Ferré y Francia. En menos de 3 minutos había un patrullero en el lugar, y si bien se trató de una falsa alarma, nos gratificó a los vecinos la pronta reacción policial".

ASOCIACIÓN AMIGOS DEL JARDÍN

"Nos dirigimos a los señores directores y personal de El Litoral para felicitarlos por el cambio de formato de nuestro diario santafesino. Modernizándose, se adapta a las exigencias de los nuevos tiempos. íAdelante! que seguiremos disfrutándolo".

MARÍA, DE BARRIO ROMA

"Qué pasa con la dirección del Centro Cultural, primero pagamos una platea de $30 para un malísimo espectáculo que no era el que habían programado. Segundo, nos anuncian la llegada de Cacho Castaña y la suspenden porque el señor tenía que ir a cantar a Rosario. Que se ponga las pilas por favor el director".

ENRIQUE

"Aproximadamente hace ya un año la empresa a cargo de la construcción de la autopista La Guardia-Río Colastiné eliminó el ingreso del camino al Club Caza y Pesca (zona donde además de las quintas viven muchas familias), la cual era una bajada larga de unos 50 metros y rellenada con arena. En su reemplazo han construido una nueva a modo de terraplén ya tiene una pendiente de tal vez 5 metros, que ahora, además de estar destruida por las lluvias, no nos permite tampoco los días de lluvia salir o trepar por ella, ya que los vehículos patinan en el barro y la mayoría nos empantanamos o caemos en la zanja. Por favor, a quien corresponda: Vialidad Provincial, Municipalidad o a la misma empresa, les solicitamos hacer una bajada más extensa y compactarla con arena".

JORGE SCHWEIZER, DE SANTO TOMÉ

"¿Fracasó la búsqueda de financiación de la obra puente Santo Tomé-Santa Fe? Esperemos que no. Esperemos que el dinero que fuimos a buscar a China lo encontremos en nuestra propia casa, en Argentina, antes que en cualquier otro rincón del mundo. Como hicimos ahora, hace muy poco, después de la crisis de 2001, que aprendimos a vivir con lo puesto. Ninguna misión comercial es sencilla. Los gobernadores integrantes de la Región Centro lo saben, pero así y todo no perdieron las esperanzas al ir en busca de ese dinero que permitiría levantar obras, proyectos inconclusos que necesitamos cimentar, ya sea en función de una proyección mundial (léase intereses chinos o en todo caso binacionales), que hoy está en búsqueda de alimentos para satisfacer sus 1.300 millones de bocas. ¿Por qué fuimos a China a buscar la plata? De todos estos proyectos, incluido el futuro puente Santo Tomé-Santa Fe, son: Sistemas de Autopistas Regionales: tramo Concordia-Paraná; tramo Santa Fe-Santo Tomé-Córdoba; tramo San Francisco-Río Cuarto; tramo Victoria-Diamante-Paraná. Sistemas de Puertos Regionales: puerto Santa Fe, puerto Diamante, de Entre Ríos; puerto Ibicui; Plan Circunvalar, de Santa Fe, y puente Reconquista-Goya. Digamos, si bien son los chinos los que ven que el hambre los acosará, ya están en búsqueda en el mundo donde hacer fuertes inversiones a futuro, pero no quita que la filosofía oriental vaya incluso a contramano de las urgencias occidentales (de las nuestras, los argentinos en general y los de la Región Centro en particular). Si bien nosotros tenemos toda nuestra riqueza en bruto y aún los proyectos en papeles, no quita que el comunismo de Mao Tse Tung, bien retrógrado en algunos aspectos (donde se justifican la violencia en su aplicación), y el pragmatismo económico de Ju Jiantao, vayan a contramano de nuestras ansias de progreso, es decir, resumiendo, no nos convienen hoy por hoy. Pero si de progreso se trata, no deberíamos rendirnos al capital de cualquier origen, por más que la globalización hoy hace epicentro de riqueza en China. Los chinos solucionarán primero sus urgencias dentro de un plan a larguísimo plazo (hoy industrial y mañana en cualquier otro orden), de gran semejanza con Estados Unidos con el petróleo mundial (por supuesto que ellos, hoy sin violencia ni engaños descarados). En un futuro, al final del juego, ambos se arreglarán de acuerdo a sus dominios en saber quién gana la pulseada final. Pero mientras tanto, nosotros debemos observar a quién entregamos nuestras rutas, nuestros puentes, nuestros futuros peajes, digámoslo abiertamente: con toda razón, los chinos querrán cobrarse lo invertido, si lo realizan, no sólo en especies, sino en moneda contante y sonante. ¿O en esta inicial cautela en Pekín, han visto los orientales algo de aquéllo sobre el acuerdo forzado entre nuestro país y Gran Bretaña en concesiones eternas por rutas y peajes, de acuerdo a los tratados por la guerra de las Malvinas, y no quieren acercarse a un tema que no les es propio? Seguramente no habrán querido pisar el jardín de otra potencia mundial y nosotros fuimos inocentemente a ofrecer lo que no es ya nuestro. Otro asunto cercano, si recordamos (u olvidamos) acaso las viejas triangulaciones comerciales, industriales, etc., como por ejemplo que no podemos venderle nada a África si no es a través de Alemania. Esta antigua práctica ¿no existe más? Pero bueno, nos sentimos un poco marcopolos y salimos igual, empujados por ese deseo irrefrenable de lograr el progreso regional que hoy día no se da en la medida de nuestras expectativas. Se cerraron algunos acuerdos comerciales privados y públicos en educación y otros temas más, pero otros, de mayor envergadura, permanecerán en el tintero por algún buen tiempo, que inclusive nosotros tal vez, no veremos plasmar en una firma. No estuvo nada mal la iniciativa pero entonces, viéndolo como digo ¿por qué no fuimos directamente a Estados Unidos a buscar el financiamiento?, ¿acaso no deseamos como Región Centro, herir el discurso nacional con los gringos? Puede ser. Como Región Centro o como lo que queramos ser, no debemos despegarnos del derrotero nacional si pretendemos, también, conformarnos".