La defensa de Romina reclamará su absolución

Tribunal encontró atenuantes para no condenar a perpetua

La Justicia creyó al hombre, cuando dijo que si tuvo relaciones sexuales con la imputada, cuando ella tenía 17 años, fue con su consentimiento. Foto: Agencia Télam.. 

La condena a 14 años de prisión para Romina Tejerina, la joven de 21 años que mató a su beba recién nacida, producto de lo que ella calificó como una violación reavivó, entre otros efectos, el debate sobre el aborto.

Buenos Aires (AFP).- La joven Romina Tejerina -quien mató a hija recién nacida- fue condenada por homicidio agravado por el vínculo, pero los magistrados reconocieron la existencia de circunstancias atenuantes para no otorgar la prisión perpetua que había reclamado la fiscalía.

El juicio oral, así como el fallo, fue transmitido en directo por televisión. El caso de Romina se fue convirtiendo en emblemático para la sociedad, que tomó partido.

En su testimonio, Romina dijo que al nacer la beba vio en su rostro la cara del hombre que afirma la violó, lo que la llevó a herirla de muerte.

Eduardo Vargas, el hombre al que Romina denunció, tiene 20 años más que ella. Vargas estuvo 23 días detenido, pero finalmente fue exculpado porque la Justicia creyó su argumento de que la joven había estado de acuerdo en mantener relaciones.

Romina recién denunció la violación después de la muerte de la beba y aseguró que había ocultado el ataque y el embarazo por vergüenza y miedo.

El 21 de febrero de 2002, sin ayuda, dio a luz a una niña de seis meses y medio de gestación en el baño de su casa. Allí la encontraron sus hermanas con la beba ya herida.

La recién nacida murió cuatro días después en el hospital, y la joven quedó detenida.

La defensa

La defensa de Tejerina, que había pedido su absolución por "inimputable", anticipó que apelará el fallo ante la Cámara de Casación Penal, pero reconoció un avance en la decisión.

"Hace dos años, Romina era una criminal desalmada para la Justicia, y hoy por lo menos se reconoce que hubo circunstancias atenuantes, porque si no le hubieran dado la perpetua. No obstante, nosotros no estamos de acuerdo con la condena y seguiremos reclamando la absolución", dijo el defensor Fernando Molinas.

La joven lloró al escuchar el fallo y se abrazó con su abogada. Su madre y sus hermanos no habían sido autorizados a ingresar a la sala de audiencias para la lectura de la sentencia, por haber insultado a la fiscal.

La joven, que ya tiene cumplidos dos años y dos meses de prisión efectiva, proviene de un hogar humilde de la provincia de Jujuy.

"Este fallo es una cuestión política, porque no se "bancan" que una joven haya descubierto todo esto. Otra vez se vuelve a criminalizar a la pobreza, pero nos une la solidaridad de la gente", dijo Mirta Tejerina, hermana de la acusada, al fustigar el fallo del tribunal.

La calle

Mientras se sustanciaba el juicio oral contra Tejerina, militantes de la agrupación piquetera Corriente Clasista Combativa, de fuerte incidencia en Jujuy, marcharon cada día hasta el tribunal con pancartas que pedían por su libertad.

El juicio también coincidió con el lanzamiento de una campaña a favor de la despenalización del aborto, encabezado por agrupaciones de mujeres y organismos humanitarios en Buenos Aires.

Actualmente, la interrupción del embarazo sólo es permitida si la vida de la madre está en peligro o en caso de violación de una débil mental.

El ministro de Salud, Ginés González García, reclamó que se adopte un texto menos restrictivo de la norma, lo que le valió una virulenta campaña en su contra de parte de la Iglesia Católica y de los medios más conservadores.

Según datos oficiales, 500 mujeres mueren al año en nuestro país por abortos clandestinos, y miles son las que quedan con secuelas físicas y/o psicológicas.

Liliana Vázquez, integrante de Mujeres Católicas por el Derecho a Decidir de la provincia de Córdoba (centro), reveló que en un año "se calcula un millón de abortos en la Argentina contra 750.000 nacimientos".

Asegura que no la violó

Buenos Aires (DyN)

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Eduardo "Pocho" Vargas, el hombre señalado por Romina Tejerina como su presunto violador y padre de la beba que mató hace dos años, aseguró que "no" violó a la joven, sino que mantuvo con ella "una relación consentida y nada más". Asimismo, sostuvo que durante "un año, más o menos" entabló una "relación amistosa y más que nada una historia sentimental" con Tejerina cuando tenía 17 años "hasta que se desencadenó esta farsa que inventaron las hermanas y ella".

"Ellos llegaron a vivir al lado de mi casa dos años antes que inventaran toda esta historia, éramos vecinos", recordó Vargas y aseguró que la versión de la violación "es una historia que armaron para salvar lo insalvable".

Vargas consideró que "lo que hicieron con esa beba es terrible", en alusión al ataque con 21 cuchilladas. "Claro que no la violé", acotó Vargas y recordó que cuando lo detuvieron "se pidió que se haga un ADN como para saber con certeza lo que se estaba diciendo, pero no se pudo realizar porque hubo otras pruebas antes que todo eso".

Por otra parte, aseguró: "Tuve una sola relación con ella, fue una relación consentida y nada más. Después se armó todo esto". Vargas, un comerciante de 42 años, también admitió que en ese presunto encuentro "no" se cuidaron con preservativos por lo que estimó que la beba "podría haber sido" suya. "Le tendrían que haber dado prisión perpetua", estimó y advirtió que no "ando festejando por la desgracia de otro, pero a mí, esta gente me arruinó la vida".

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Los abusos

Buenos Aires (DyN).- El Movimiento Argentina Rebelde (ex MIJD) criticó el fallo contra Romina Tejerina, y señaló que "las mujeres argentinas somos las negras del Apartheid machista". La agrupación piquetera, liderada por Daniel Aguirre, denunció que Tejerina "fue víctima de abuso sexual de un hombre, abuso psicológico por parte de la Justicia `de los hombres', y finalmente un abuso físico de esa misma Justicia, que la priva de la libertad". Para los piqueteros, "la Justicia condenó a Romina `por reaccionar' contra todos esos abusos", dijo la presidenta de la asociación civil MAR, Perla Cardozo.