Cartas a la Dirección

Francia y Aguas

Señores directores: Al integrar y dirigir empresas hay quienes se olvidan lo que ellas representan ante los pueblos del mundo. En este caso, Francia, que fue la cuna de los derechos humanos.

Soy jubilado con la mínima y mi pecado fue solicitar el beneficio que esa condición otorga: un descuento de $ 10 por bimestre facturado. Es poco, es un grano de arena, pero también es poco lo que cobro para afrontar este mes el pago de $ 46,82. Me fue negado este beneficio, por haber cometido la herejía de haber colocado mi única propiedad como bien de familia.

No obstante, seguiré admirando a ese gran país tan culto, ordenado, etcétera, que legó al mundo el inolvidable slogan: "Libertad, Igualdad, Fraternidad".

Buen viaje, no olviden aplicar allá esas simpáticas disposiciones.

Juan B. Colautti. LE: 6.200.606. Ciudad.

Oración para ciertos periodistas

Señores directores: Algunas jornadas atrás fue el Día del Periodista. Felicitaciones para los que se han ganado honorablemente ese título. Para el resto, aquí va la "Oración del Periodista".

"Supremo editor nuestro que estás en los cielos, santificado en primera plana sea tu nombre y también el nuestro, en lo posible. Hágase tu voluntad allí en los cielos y la nuestra aquí en la tierra, de preferencia, edición "extra". El crimen sangriento nuestro de cada día dánoslo hoy, por favor acompañado de algún escándalo sexual bien asqueroso y perdona nuestras leves exageraciones y licencias literarias, así como nosotros perdonamos a nuestras víctimas cuando ya no nos son necesarias y jamás perdonaríamos a las de la competencia, y no nos dejes caer en la tentación de decir únicamente la verdad, mas líbranos de todo plagio y censura, amén. Imprímase".

Jorge Ceruti DNI: 7.709.233. Ciudad.

¿Qué le debemos al "Che"? V

Señores Directores: Cuánto rencor puede causar el nombre de una calle, hasta dónde se puede llegar para evitar que se le cambie el nombre a una calle por el de uno de los personajes más controvertidos y discutidos de la historia mundial. Pero bueno, cuando leemos las cartas de lectores anteriores referidas a este tema, podemos ver algunos de esos límites irracionales a los que pueden llegar algunos seres humanos. Son los mismos que no se quejan porque haya calles con nombres como Julio A. Roca o Rivadavia, uno un genocida y el otro el iniciador de nuestra deuda externa. Entonces me pregunto, ¿sería justo reclamar para que se les saquen esos nombres a las calles? Definitivamente no, haciéndolo no se niega ni se reivindica la historia, en todo caso, el recordar nombres de nuestra historia nos permitirá no repetir errores y aprender de aciertos.

¿Qué pasaría si cada uno de los ciudadanos, de acuerdo con nuestro propio criterio, rechazáramos los nombres de las calles que nos parecieran denigrantes, vergonzantes, inmorales o injustos? Seguramente tendríamos calles con números. Quizá a estos protestatarios les conforme eso, o quizá se conformen cuando existan calles con nombres como Jorge R. Videla o Juan C. Onganía, quizá por ahí pase todo y entonces se guardarán a silencio.

Héctor S. Boaglio DNI: 11.316.229. Ciudad.