Con unánimes elogios de la prensa internacional para la nueva estrella Lionel Messi, goleador y figura del campeonato mundial Sub-20 de fútbol que se disputó en Utrecht, Holanda, Argentina se consagró por quinta vez campeón de la categoría al vencer a Nigeria por 2 a 1 en la final.
De la redacción de El Litoral
El seleccionado argentino Sub 20 se consagró ayer campeón mundial de la categoría por quinta vez en su historia, tras vencer a su par de Nigeria por 2 a 1 en la final del torneo que se disputó en los Países Bajos.
Lionel Messi, a los 40 minutos del primer tiempo y a los 30 del segundo, ambos de penal, anotó los tantos para los argentinos, con lo que se coronó como goleador del torneo con seis goles. Por su parte, el delantero Chinedu Ogbuke, a los 7 del segundo período, marcó el transitorio empate para los nigerianos.
Argentina había alcanzado anteriormente la gloria en los Mundiales de Japón 1979, Qatar 1995, Malasia 1997 y jugando como local en 2001. Messi, además de ganar el Botín de Oro al máximo goleador, fue la gran estrella de la cita holandesa y, por esa razón, fue condecorado con el Balón de Oro como el mejor jugador del torneo, votado por los periodistas acreditados.
Dominio africano
La final tuvo una Nigeria superior que contó con los mejores momentos de fútbol y manejo del balón, y una Argentina desconocida, dubitativa, que dependió del genio de Messi, quien no rehuyó la responsabilidad y sacó chapa de crack.
La primera parte fue favorable a los africanos, que con las combinaciones entre los mediocampistas Owoeri, Promise Isaac y Mikel Obi, su figura, y las subidas del lateral Taiwo, desbordaron el planteo albiceleste pero carecieron de contundencia.
Sin embargo, el equipo dirigido por Francisco Ferraro se puso en ventaja en la primera jugada de riesgo que generó, luego de que Messi, tras una buena jugada personal, fuera derribado dentro del área por Adeleye y el árbitro noruego Terje Hauge marcara penal. El mismo Messi demostró toda su calidad y, con un toque sutil de su pie izquierdo a la derecha del arquero Vanzekin, puso el 1 a 0 cuando faltaban cinco minutos para el término de la etapa inicial.
En el segundo tiempo, Nigeria se lanzó sobre el arco de Oscar Ustari buscando el empate, que llegó a los 7 minutos, tras un error de los centrales Gabriel Paletta y Ezequiel Garay, que permitieron el cabezazo goleador de Ogbuke, después de un centro desde la derecha.
Aparece el campeón
La reacción de Ferraro fue realizar tres cambios en 15 minutos: Sergio Agüero por Obermam, Armenteros por Archubi y Biglia por Gago, pero sólo implicó cambiar nombres y no generar alguna variante táctica sustancial. Sin embargo, el ingreso de Agüero -quien tuvo dos chances de anotar, la más clara cuando eludió al arquero y no pudo definir- fue clave, al extremo que generó la jugada del segundo penal, cuando el guardavallas Vanzekin le cometió falta, que Messi cambió por el 2 a 1.
Los minutos finales fueron todos de Argentina, que supo administrar a su favor la desesperación de los nigerianos, controlando la pelota y el ritmo del juego hasta que el árbitro pitó el final y la obtención del título dejó de ser un sueño para convertirse en realidad.
Los cinco títulos
Argentina 2001 Ghana 3-0
Malasia 1997 Uruguay 2-1
Qatar 1995 Brasil 2-0
Japón 1979 Unión Soviética 3-1