Con un penal en tiempo extra, venció por segunda vez consecutiva al Santa Fe Rugby Club. Se adjudicó la Copa Sanatorio Santa Fe, instituida para el ganador.
En la insoportablemente gélida tarde de la víspera se disputaron los encuentros correspondientes a la primera fecha de la zona
En ese contexto, el Club Universitario de Santa Fe se dio el gusto de vencer por segunda vez consecutiva en el año al Santa Fe Rugby Club -esta vez por 17 a 15- iniciando exitosamente su participación en el selecto "grupo de los ocho" equipos que están en condiciones de pugnar por el preciado cetro regional.
Premio al mejor
La primera consideración que surge en torno al intenso -y por momentos deslucido encuentro- es que más allá de la suerte que corriese el kick que en el quinto minuto de descuento le otorgó la festejada victoria al equipo visitante, quedó la sensación que hasta ese momento, los mayores méritos los había acumulado Universitario.
Por ende, el certero disparo de Guillermo Signorelli (autor también de un impecable drop sobre el cierre del primer tiempo), no hizo más que impregnar de justicia al cerrado marcador final.
Bien se puede partir de la base que el ganador jugó casi al límite de sus posibilidades, fortaleciéndose desde diferentes situaciones del juego. En general, con la entereza de siempre y una excelente organización defensiva, secundada por un paciente control de cada pelota obtenida.
En particular, con una primera etapa casi ideal, en la que el scrum fue un estandarte que no sólo le permitió predominar en un contexto tan equilibrado; sino también convertirse en "plataforma de lanzamiento" para la conquista de la mayoría de los puntos que establecieron el 11 a 0 parcial.
Esta diferencia resultó clave para el devenir del cotejo, ya que pese a que Santa Fe Rugby estableció cierto predominio en el complemento, no logró pasar al frente del marcador hasta el tiempo extra; cuando en el tercer intento consecutivo su poderoso maul se derrumbó en el ingoal de la entidad del barrio Las Delicias.
Los defectos del perdedor
Amén de la señalada solvencia defensiva del vencedor, resulta imposible dejar de señalar los errores cometidos por un equipo que en la ronda inicial de la competición había denotado un gran equilibrio individual y colectivo.
Sin embargo, Santa Fe Rugby ayer no encontró casi nunca la forma de contrarrestar la solidez de un adversario que además fue muy inteligente.
Porque a las escasas pelotas de calidad que dispuso, el anfitrión no supo utilizarlas convenientemente, producto de que tomó decisiones equivocadas o bien las desperdició a través de impericias en el handling (condicionado por las adversas condiciones meteorológicas) impropias de sus características.
La excepción fue el buen ensayo que tras recorrer a casi todos los backs fue apoyado por Ignacio Carballo, tras una acción nacida en un penal cobrado dentro de los 22 metros adversarios.
Para colmo de males, tampoco supo aprovechar la notoria mejoría expuesta en la melée en el segundo tiempo, ya que muchas de esas formaciones culminaron en infracciones o imperfecciones.
Los unos y los otros
Pasado el escaso tiempo de los festejos del vencedor y los lamentos del perdedor, el gran interrogante radica ahora en conocer cuáles serán los efectos que este resultado ejercerá sobre ambos.
Está claro que al Club Universitario debería otorgarle una enorme inyección de optimismo de cara al futuro; que no sólo estimulará el esfuerzo que las huestes de Ignacio Irigoyen, Diego Frenguelli y Néstor Bagnarol efectúan (en medio de no pocas dificultades); sino que además tendría que mantener viva la esperanza de meterse entre los mejores del torneo.
Como contrapartida, Santa Fe Rugby Club tendría que reencontrarse inmediatamente consigo mismo: no solamente con su juego, sino fundamentalmente con la respuesta mental denotada en una ronda inicial que, con excepción del debut, resultó irreprochable.
Es que sabe perfectamente que la altiva posición que ostenta no garantiza demasiado. A punto tal que el bicampeón regional -GER- ayer le descontó cuatro valiosos puntos.
Para ambos, buena parte de las respuestas se conocerán el fin de semana venidero, ante adversarios de fuste. Tal como inexorablemente ocurrirá en todas las fechas restantes: porque en esta instancia, no hay margen para las dilaciones.
Santa Fe RC 15 - Universitario (SF) 17
El match se disputó en la cancha principal de Sauce Viejo, ante un regular marco de público, con el referato del entrerriano Jorge Caíno.
Juan Pablo Poletti, Federico Caputto y José de Biaggio.
Lo que viene
La segunda fecha del sector principal del certamen interuniones se desarrollará el sábado próximo y contendrá los siguientes cotejos. En el barrio Las Delicias de nuestra capital, Universitario de Santa Fe recibirá a Jockey Club de Rosario; en la capital entrerriana, el Club Atlético Estudiantes de Paraná a Santa Fe Rugby Club; y en el Parque de la Independencia, Gimnasia y Esgrima de Rosario a CRAI.
Rival directo
Con una solvente producción, que no hizo más que evidenciar buena parte de la recuperación que era dable esperar, Gimnasia y Esgrima de Rosario superó en la condición de visitante al Jockey Club de Rosario en Fisherton, por 27 a 10.
De esta forma, el bicampeón regional no sólo inició satisfactoriamente esta instancia decisiva; sino que al ganar con bonus también recuperó valiosísimos puntos, aproximándose a quienes lo preceden en las posiciones (sobre todo, a Santa Fe Rugby Club).
Obviamente, la entidad del Parque de la Independencia mantiene firme sus aspiraciones de acceder a la definición del certamen, tal como ocurrió en las temporadas anteriores. Potencial, no le falta.
César Miño