En un principio el fuego llegó a un colectivo en la terminal de ómnibus. Luego lo padeció un supermercado en el vecino Paraguay, hasta que llegó la vivencia de una evacuación forzada por un sismo, que se parecía más a una película de Benny Hill, en los edificios de la Municipalidad y el Centro Cívico Gubernamental.

Pero hizo falta un fatídico Cromagnon para que el tema de la seguridad en los lugares cerrados se pusiera en el tapete. Todos cayeron en la mira. Primero los boliches y pubs, después los comedores, estaciones de servicio, peloteros y shoppings.

El municipio, encargado de controlar las condiciones de todos estos espacios, no se quedó afuera. A fines de enero El Litoral publicó una nota donde quedaba en evidencia la carencia de medidas de seguridad adecuadas en el palacio municipal y la gran mayoría de sus dependencias.

Seis meses después, todo sigue igual. Aunque sí vale la aclaración: se colocaron matafuegos en los espacios comunes de los 12 pisos del edificio ubicado en Salta al 2900, pero aún falta mucho por hacer.

Teniendo en cuenta que el intendente Martín Balbarrey firmó en los primeros días de 2005 sendos decretos con minuciosas medidas de seguridad para prevenir incendios o cualquier tipo de siniestros e, incluso, implementó una eficaz política para controlar su cumplimiento, llama la atención que aún no se hayan aplicado en su propia casa.

Empecemos por el principio: el palacio, donde pasan cerca de 2.500 personas por día.

- Las puertas de entrada y salida se abren hacia adentro cuando, como lógica medida de seguridad, deberían hacerlo en sentido contrario).

- Los empleados nunca fueron instruidos por bomberos sobre qué hacer en caso de siniestros. Tampoco cuentan con un plan de contingencia ni con las medidas de seguridad necesarias para evacuar a la gente en caso de emergencia.

- La única salida de emergencia indicada en todo el edificio (los 12 pisos) es la que separa el edificio municipal del Concejo, en el ala este. Lo llamativo, además de que se abre hacia adentro, es que está trabada y, si llegara a suceder algo, ¿quién tendría tiempo de abrirla?

- No existe una escalera externa, burlando la ordenanza 7.279 que indica que en todo edificio que albergue más de 500 personas debe haber una "abierta y con material incombustible".

- No hay señalización, salvo un cartel en blanco y negro (que debería ser verde y blanco según las normas IRAM) que indica que es la supuesta Salida de Emergencia. Su apertura hará sonar la alarma.

- En el acceso principal, a ambos lados hay dos soportes plásticos destinados a albergar matafuegos que no cumplen esa función: no contienen ninguno. En la planta baja, de atención al público, hay sólo dos matafuegos: uno en el pasillo del ala oeste y otro en la puerta trasera -lugar por donde dicen que entra y sale el intendente.

En marzo de 2004 los concejales Leonardo Simoniello y Jorge Henn (UCR-Encuentro) plantearon mediante un pedido de informes la duda sobre si "la Municipalidad de Santa Fe y edificios dependientes de la misma, cuentan con un plan de evacuación en caso de incendios o cualquier otra emergencia que ponga en riesgo al personal y/o las personas que allí se encuentran".

El mismo, que fue aprobado en la sesión del jueves 25 de agosto, cuestiona sobre los matafuegos, escaleras, salidas de emergencia con que cuenta y si se ha brindado al personal municipal información sobre prevención, protección y control de incendios o evacuaciones en caso de siniestros. También señala la realización de simulacros, señalización interna y la consulta para el caso a la Agrupación Bomberos Zapadores.

La pregunta sobre qué hacer en caso de sorprenderse con un siniestro aún no fue respondida por el Ejecutivo municipal. "Nunca lo contestaron", dijo Simoniello.

"Esto tenía que ver con la improvisada evacuación que desencadenó un sismo el año pasado y con lo de Asunción", a lo que el edil agregó que "después de lo de Cromagnon adquirió otra dimensión, yo entiendo que no tienen un plan todavía".

Y, si bien "a los privados se les exigió que cumplieran con las medidas", en la Municipalidad "todo sigue igual".

El panorama no varía en muchas de las dependencias municipales. Tal es el caso de la Dirección de Electromecánica, Espacios Verdes, Vialidad y las oficinas asentadas en la Terminal de Ómnibus.

En la primera de ellas, donde se dedican al mantenimiento del alumbrado público, "no tenemos nada de matafuegos ni mangueras" según un empleado que trabaja allí desde hace 15 años. Una mirada por el húmedo lugar confirma sus palabras que son respaldadas por un compañero: "Al sistema de matafuegos no se le hace el control periódico que se le tiene que hacer, hay matafuegos pero están dispuestos desde hace años".

Cuando termina de decir esto muestra el elemento colgado de una pared. Parece que viajó por el tiempo desde los años 50 y se asemeja más a un objeto de colección que de acción contra incendios.

Lo llamativo también es que, aunque trabajan con corriente eléctrica, no poseen guantes aislantes y "nunca nos capacitaron para actuar en el caso de que a alguien le pase algo en el trabajo".

Una queja que surge es la falta de desinfección en la dependencia luego de que las aguas del Salado treparan varios metros de sus paredes. "No hubo provisión para el personal de cloro, detergente o desinfectante para hacer una limpieza general del lugar que se inundó. Nunca se hizo una limpieza general".

A la humedad, se le suman "las ratas, no hay veneno para las ratas porque la gente de Zoonosis nos dice que no tienen. Estamos igual que la ciudad: totalmente desprotegidos".

En bulevar Pellegrini al 3800, los empleados de Vialidad se encuentran "mal. Están todas las máquinas paradas, los camiones... Matafuegos trajeron después de la nota que hicieron Uds. -haciendo referencia a la publicación de El Litoral del 28/01/05- pero plan de contingencia no tenemos".

Además, "nunca fuimos instruidos sobre qué hacer si pasa algo acá", donde los empleados calientan brea que depositan en camiones para el bacheo de las calles. A pesar de estar expuestos directamente a temperaturas muy altas, no tienen guantes y deben usan "ropa común -no es la que indica la ART-".

Sus vecinos de Espacios Verdes están preocupados porque "las instalaciones eléctricas y los lugares donde trabajamos no son adecuados". Y realmente es así: los cables sueltos se desprenden de una instalación que dista mucho de las últimas versiones. Es más, a pesar de que la electricidad es la base de su trabajo, no tienen interruptor.

En los pasillos del ala sur de la planta alta de la Terminal, donde funcionan la Dirección de Transporte, el Departamento de Informes y Promoción Turística, Habilitación de Negocios y la Secretaría de la Producción, entre otros; sólo hay un matafuegos a la vista. En el sector norte, donde está el Safetur, no se observa ninguno.

Mejor prevenir

Los Bomberos Zapadores son los indicados para dar instrucciones sobre las medidas que hay que implementar para llevar seguridad en superficies cubiertas: