Nutrir en Derecho y Salud
Una propuesta de extensión de la UNL a los barrios de la ciudad
Capacitan a responsables de comedores y jardines municipales y centros de acción familiar en Derecho de Familia y nutrición. Ayer se firmó un convenio para aunar esfuerzos entre la UNL, la Municipalidad y la provincia.

Nutrir en Derecho y Salud es la denominación de una de las Acciones de Extensión al Territorio que desarrolla la Universidad Nacional del Litoral, en este caso, con un trabajo conjunto de las Facultades de Ciencias Jurídicas y Sociales y de Bioquímica y Ciencias Biológicas. El objetivo es que las familias de los diversos barrios de la ciudad y la zona obtengan orientación básica y primaria en materia de salud nutricional y Derecho Familiar, y que asuman conductas adecuadas para la prevención y solución de sus problemas.

El proyecto se viene desarrollando desde noviembre pasado y tiene plazo por un año. Pero ayer se sumaron, mediante la firma de un convenio, la provincia y la Municipalidad.

El acto se concretó en el salón del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL. Fue presidido por su rector Mario Barletta, acompañado por el decano de esa casa de estudios, Mariano Candioti; la responsable del proyecto, María Magdalena Galli Fiant; autoridades de la Facultad de Bioquímica, de Extensión Universitaria y de la Municipalidad.

El intendente Martín Balbarrey representó al municipio en la firma del acuerdo y la subsecretaria de Promoción Comunitaria Liliana Loyola, a la provincia.

Un trabajo conjunto

En primer lugar, Barletta destacó la importancia de la acción de extensión al territorio y agradeció que municipio y provincia se sumen a este trabajo, en tanto consignó que los beneficiarios directos de la propuesta son los responsables de las instituciones que van a recibir la formación necesaria sobre Derecho de Familia y salud nutricional, dos aspectos "que hacen a la calidad de vida".

A su turno, Galli Fiant fue la encargada de reseñar las principales características del proyecto que se divide en dos etapas: la primera se inició en noviembre, con la atención de casos emergentes donde estaba involucrado el conflicto familiar y, en salud, con la detección temprana de patologías y profundización en otras. En ello trabajaron profesionales y voluntarios de Derecho y Bioquímica, en relación con los referentes de cada institución: mamás colaboradoras, encargados, asistentes sociales que son el nexo la respuesta al particular.

En la segunda etapa, se va a profundizar en conocimientos básicos y en la formación de los recursos humanos.

Por las características de las instituciones a las que va destinado el proyecto, la población que se atiende es variada; hay niños pero también adultos y ancianos, explicó la abogada. "La variedad de destinatarios aporta un elemento de dificultad, pero a la vez de riqueza. Hay barrios que fueron atravesados por la inundación; otros, con comunidades tobas; otros, de clase media empobrecida. Los recursos en cada zona son distintos", agregó.

El proyecto se desarrolla en los jardines municipales de La Guardia y San Lorenzo, en los comedores municipales y en 14 centros de acción familiar, incluidos Santo Tomé y Rincón.

De la Redacción de El Litoral