Se trata de un producto que ayuda a la fertilización de los cultivos y no es tóxico. La utilización es estratégica en determinados estadíos del cultivo de soja y se desarrolló a partir del humus de lombriz.
Anoche se presentó en el Centro Comercial de Santa Fe la enmienda biológica líquida FFO (Fertilización Foliar Orgánica), producto elaborado por la empresa Conrado Braem y que cuenta con asesoramiento, seguimiento y control realizado en los laboratorios del departamento de Química de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional del Litoral.
Al lanzamiento asistieron el rector de la UNL, Prof. Ing. Mario Barletta, el decano de la Casa de Altos Estudios, Bioq. Amadeo Cellino; el intendente de la Municipalidad de San Carlos, Ing. Jorge Placenzotti, repartición que apadrina a la Universidad, productores y representantes ligadas al quehacer agropecuario.
En primer término habló el veterinario, Matías Braem, quien destacó la satisfacción de la empresa "por el trabajo realizado por Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas a través de la cátedra de Química Inorgánica".
También el joven profesional resaltó la importancia de los ensayos de campo que se desarrollaron en las provincias de Entre Ríos, Córdoba y Santa Fe que permitieron apreciar in situ las fortalezas de la enmienda biológica.
Matías adelantó que si bien la aprobación del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) es para soja se trabaja en forma experimental en otros cultivos como arroz, alfalfa y trigo y agradeció a la Universidad Nacional del Litoral por el trabajo desarrollado.
Incentivar el conocimiento
Por su parte, el rector de la Casa de Altos Estudios, Mario Barletta, destacó la importancia de transferir conocimientos y de profundizar cambios. Al respecto citó el ejemplo de los países asiáticos que han revertido sus crisis con desarrollo sustentable. "Hay que aprender de ellos", aseveró.
Luego Barletta elogió la puesta en marcha de 152 convenios operativos que firmaron con el sector privado que le permite a la UNL obtener recursos por fuera del presupuesto universitario tan necesarios para mantener el equipamiento científico y humano.
También el rector anunció para el año próximo la puesta en marcha de una incubadora de empresas para graduados y poder aprovechar y poner en práctica lo planteado en los trabajos de tesinas.
"La Argentina no tiene oportunidades sino desarrolla una alianza estratégica para el crecimiento", concluyó Mario Barletta.
Seguidamente, el profesor Héctor Odetti, jefe de cátedra de Química Inorgánica, destacó el trabajo en conjunto realizado con la empresa Conrado Braem de San Carlos Sud y explicó con justeza aspectos del plan de acción, estudio de contenido, fases y control del proceso de compostaje.
El docente universitario cerró su exposición con una recomendación que tiene que ver con la utilización de este tipo de productos que redundarán en un mejor equilibrio de los ecosistemas".
Fortalece las raíces
Conrado Braem es de San Carlos Sud y posee un espíritu emprendedor ya que después de no pocos estudios de campo y ensayos logró cristalizar el anhelo de la Fertilización Foliar Orgánica (FFO), enmienda biológica que contiene ingredientes naturales y microorganismos mesófilos aeróbicos que aseguran una buena fertilización.
También se cuentan entre sus fortalezas más destacadas los micronutrientes esenciales para un buen crecimiento de la planta.
El productor y elaborador puso de manifiesto en diálogo con El Litoral el papel que desempeñó en el proyecto la Universidad Nacional del Litoral (UNL) con quien se firmó un acuerdo hace dos años en Servicios a Terceros para que la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas a través de la cátedra de Química Inorgánica realice el asesoramiento, seguimiento y control de calidad para la producción de fertilizantes.
Entre las ventajas de utilizar FFO se cuenta que el producto ayuda a la fertilización y no reemplaza a los tradicionales pero se convierte en un buen complemento para ser utilizado ya que "la calidad del producto está garantizada y el uso es estratégico porque se utiliza en determinados estadíos. No es tóxico y está libre de patógenos como la salmonella y eschericha coli", explicó Braem.
El titular de la empresa sancarlina en diálogo con la prensa insistió en que la aplicación foliar mejora el estado de la planta porque los microorganismos presentes en FFO permiten mejorar su sistema inmune lo que aumenta las defensas contra el posterior ataque de los patógenos, otorgando la posibilidad de un mayor rendimiento.
De esta forma, promueve la población de micronutrientes en el suelo que nitrifican, fijan el nitrógeno y mineralizan macro y micronutrientes. El nitrógeno del amoníaco, proveniente de la descomposición de todos los seres vivientes (plantas y animales) se encuentra en forma que no es aprovechable para el uso por todas las plantas.
El elaborador destacó que la enmienda contribuye a obtener cosechas más lucrativas y promueve en las plantas un vigoroso sistema de raíces debido a una mejor condición del suelo, mejor oxigenación, menor erosión y benéfica nutrición de las plantas.
Además incrementa el rendimiento y calidad debido a la mejor nutrición de las plantas; acelera el crecimiento y completa los ciclos de vida de las plantas, incluyendo floración y desarrollo de las semillas, reduciéndose por lo tanto el período entre la siembra y la cosecha.
En ese sentido, Braem manifestó que "disminuye la dependencia en el uso de fertilizantes químicos, reduciéndose los costos de producción y los problemas de logística asociados con los fertilizantes tradicionales".
Aunque los cultivos tienen una gran variedad y necesidades de manejo distintas, todas las plantas se benefician de condiciones mejoradas de fertilización con la utilización de este producto.
De la Redacción de El Litoral