El Segundo Argentino de Teatro transita su último tramo con la presentación de producciones provenientes de Buenos Aires, Rosario, Córdoba y nuestra ciudad. Este encuentro, organizado por la UNL -que comenzó el pasado lunes-, se despide de su edición 2005 con seis obras caracterizadas por la originalidad de sus puestas escénicas y la adaptación de textos transversales de la dramaturgia contemporánea.

La última parte del programa cuenta con la llegada de "Stefano", de Armando Discépolo. Dirigida y protagonizada por Francisco Coccuza, esta pieza se presenta hoy en dos funciones -a las 20 y a las 22- en la sala del Teatro de la Abadía.

La propuesta fue estrenada en 1985, y en ese mismo año obtuvo el Premio Moliere al Mejor Actor, comenzando así una trayectoria que atravesó las fronteras de nuestro país. Creada originalmente por Cocuzza y Víctor Mayol, en su nueva versión, esta pieza fue concebida para un solo actor que representa a "Stefano e intenta componer la ópera que en la realidad nunca compuso, en un espacio interno propio y en un momento privado", anticipan desde la producción. El actor, así, "pone en juego sus propias vivencias, pero aquellas que son esenciales a todos, y que en el devenir de nuestra realidad, acrecientan la vigencia del texto de Discépolo".

El género trágico halla en los clásicos griegos, su máximo punto de referencia y de sustento. Justamente, lo que el grupo Punto 0 de Teatro, oriundo de Rosario, se propone es recrear a través de una versión libre la "Medea" de Eurípides. Aquella mujer que toma venganza y pone en juego sus poderes como hechicera, es encarnada aquí por Vilma Echeverría. Con dirección de Gustavo Guirado, el elenco se completa con Margot Rubatino (Creonte), Ricardo Arias (Jasón), Lucila Díaz y Laura Diez (las hijas).

La traición, el amor, la muerte, y el poder atraviesan la trama de esta propuesta que se puede ver esta noche, a las 22, en Casa España.

La marca autoral de Roberto Arlt para las letras y la dramaturgia argentina resulta indiscutible. Sus criaturas desnudan las hipocresías y las moralinas que nutren el imaginario burgués, siempre latente, más allá de las décadas. En ese mundo arltiano, "Saverio el cruel" ocupa un espacio más que importante, y es la pieza que la Comedia Universitaria de la UNL produjo en su temporada 2004. Hoy, a las 24, volverá al escenario -especialmente construido- de la Fundación Birri, bajo la dirección de Marcelo Allasino, con las actuaciones destacadas de los santafesinos Adrián Airala, Selma López, Huairá Basaber, Carolina Cano, Ulises Bechis, Paulo Ricci, Luciana Brunetti y Cristina Copes. Todos representan se sumergen en la locura, la farsa y las fantasías, que tendrán un desenlace trágico.

Por otra parte, la recientemente estrenada obra de Sergio de Cecco, "El reñidero", constituye la propuesta de la misma Comedia Universitaria, pero en su edición 2005. La dirección, en este caso, está a cargo de Raúl Kreig, quien lleva adelante un reparto conformado por Daniela Ramírez, Sergio Abbate, Marta Defeis, Claudio Paz, Marcos Martínez, Rubén Von der Thüsen y Carolina Cano.

En esta historia -que se presenta mañana, a las 18, en La Juana- las figuras que sobrevuelan son las de Electra y Orestes, aunque la época que los actualiza es 1905. Palermo es el ámbito donde se ha producido la muerte de Pancho Morales, y en su velatorio se develarán las traiciones que provocaron el asesinato de aquel guapo.

Los estereotipos femeninos se reconocen como la principal temática que atraviesa "Mujeres oscuras", la obra del grupo Punto 0 Teatro, que estará mañana, a las 20, en la Abadía. Dirigida por Ricardo Arias, esta representación no deja de dar cuenta, también, de las relaciones que ligan a la madre, la mártir, la puta, la reina, la vieja, la abuela, la santa y la bruja con los hombres. En especial, con un hombre "que oficia de otro, y que narra lo que acontece en su memoria... Hijo, padre, amante, novio, macho proveedor. Situaciones reconocibles del melodrama cotidiano", describen desde la producción.

Un mujer es, también, la protagonista del relato propuesto por "Los cuadros de Marija". Escrita por Lydia Scheuermann Hodak, esta obra viene desde Córdoba, con dirección de Cheté Cavagliatto.

Marija -interpretada por Fanny Cittadini- es una expulsada croata que revela su sufrimiento, desde el cuarto de un hospital, pintando cuadros registrados en su memoria, recordando los días felices que pasó junto a su hija, los veranos en el Danubio y todo lo que desapareció con la agresión de Serbia en 1991.

Este relato, cargado de un hondo dramatismo, marcará el cierre del encuentro teatral, mañana, a las 22, en Casa España.