Dos viviendas ubicadas en el corazón de barrio Candioti fueron blanco de sendos robos este domingo. La situación planteada es grave, no sólo porque se suma a los golpes ya perpetrados (ver recuadro) sino además porque estos atracos se cometieron a escasos metros del domicilio particular del intendente Martín Balbarrey.

Los robos tuvieron lugar en dos fincas que se ubican sobre calle Vélez Sarsfield, a la altura del 3200, esto es en el corazón del antiguo barrio Candioti.

Uno de los damnificados resultó ser Juan Daniel Saez, de 47 años, el que vive junto a su esposa y sus hijos en la casa de Vélez Sarsfield 3266. Ayer, como la mayoría de los santafesinos, Saez y su familia salieron a media mañana dispuestos a disfrutar de la jornada del domingo.

Claro que en todo momento ignoraron la nefasta sorpresa que los aguardaría a su regreso, aproximadamente a las 18.

Fue al terminar la tarde cuando Saez volvió a su domicilio y ya desde el exterior advirtió que algo malo había pasado. Una de las ventanas de la casa había sido violentada y estaban los vidrios rotos.

También la alarma instalada en la parte superior de la puerta de acceso había sido arrancada desde la pared.

Lo que siguió fue tomar coraje e ingresar al inmueble para ver la magnitud del desastre. "Pudo ser peor", pensó para sí el propietario al observar lo hecho por los ladrones.

Según narró hoy en diálogo con El Litoral, los delincuentes se llevaron de su casa tres televisores, un equipo de computación completo, una impresora, cámaras fotográficas y un equipo de música.

Mientras se producía el "desfile" de patrulleros en la zona la sorpresa de los vecinos iba en aumento. No entendían cómo los rufianes pudieron actuar con tanta libertad, en pleno barrio Candioti, a pocos metros de la concurrida Costanera y teniendo en cuenta que suele ser una zona custodiada por la policía dado que allí vive el intendente municipal.

Otro de los detalles que desorienta es el día y la hora del golpe. Se sabe que los domingos la afluencia de público es mayor en cualquier lugar de la ciudad. Pero justo las cercanías de la Costanera y el bulevar son uno de los puntos que más personas atraen.

Se sabe que los sujetos actuaron a plena luz del día, con lo que es fácil deducir que para llevarse y cargar los elementos robados, lo hicieron ante la vista de todo el mundo.

Más adelante Saez aseguró que fue la tercera vez que sufre ilícitos en su domicilio, pero en esta oportunidad "se llevaron tres televisores, un equipo de audio, una computadora, una impresora y juegos de los chicos".

"Este barrio no es tan tranquilo, para nada tranquilo. En la madrugada se escuchan tiros y no es la primera vez que pasa", agregó el compungido vecino.

La secuencia siguió frente al domicilio de los Saez, esto es en Vélez Sarsfield 3251. Es de hacer notar que la finca lindera es nada menos que la del jefe político de nuestra ciudad, Martín Balbarrey.

El dueño de casa es Esteban Luis Rosso, de 37 años. Su caso la única diferencia que plantea es que los ladrones ingresaron a la finca sin ejercer violencia. En este sentido los investigadores creen que los ladrones se valieron de una llave similar o una ganzúa.

Con dicho elemento abrieron la puerta del garaje y desde allí se ganaron a las distintas dependencias de donde se llevaron también computadoras, electrodomésticos, juegos para chicos y televisores.

Sin pistas

Lo ocurrido en los domicilios de barrio Candioti viene a engrosar una serie de graves episodios que nunca fueron aclarados por la policía. Primero fue una casa de calle Cándido Pujato y 1° de Mayo, la que fue desvalijada por ladrones en ausencia de su propietario. Luego siguió lo acontecido en calle Urquiza al 3000, donde varios delincuentes se alzaron con dinero y joyas tras mantener cautivos toda una noche al dueño de casa y su familia.