Experiencia en la EGB N° 7, Presidente Juan Beleno
La escuela, semillero de ciudadanos
Padrón completo. Con el 100 % de asistencia, sin indecisos ni votos en blanco, las elecciones se desarrollaron normalmente, entre DNI de colores y sellitos de Winnie Pooh. Foto: Néstor Gallegos.. 

Alumnos, docentes y directivos participaron de las elecciones escolares, actividad que movilizó incluso a papás y mamás del establecimiento. Todo surgió cuando los chicos de 5° año preguntaron adónde van los partidos políticos cuando pierden.

"Le quiero comentar que estamos organizando una campaña política para mejorar la escuela", anticipó Jesús, de 10 años. Mientras tanto, en los pasillos del segundo piso de la escuela Beleno, los chicos formaban una extensa cola, con documento en mano, para votar... ¿Para votar?

Todo surgió a partir de las últimas elecciones legislativas del mes de octubre, cuando los alumnos de 5° año le preguntaron a su maestra adónde van los partidos políticos cuando pierden.

¿Cómo es de oscuro el cuarto oscuro?, ¿dónde se ponen los votos?, ¿qué se siente al votar? Los chicos, llenos de interrogantes, se convirtieron en el motor de una actividad que sobrepasó la clase sobre democracia de la señorita Mimí.

"Empezaron a preguntarme qué hacían los partidos que perdían. Entonces les expliqué qué son y qué hacen las minorías, qué hacían los que ganaban y cómo se relacionaban unos con otros. Allí surgió algo que me llamó mucho la atención y es que, cuando aludían a la política, hablaban de corrupción y de coimas", comentó la docente.

La inquietud podría haber sido solamente eso: un par de preguntas de chicos estimulados por un contexto electivo. Pero la docente pudo hacer de esto una situación de aprendizaje inédita, tanto para ellos como para el resto de la comunidad educativa.

"Me desesperé y decidí hacer un replanteo de qué es la política, para que no fuera sinónimo de esas dos palabras, inculcando la idea de que la democracia se hace de abajo para arriba", explicó. La maestra les sugirió a los chicos formar plataformas y elegir un representante del grado. Así, todos debatieron qué podían hacer "en lo inmediato, sin gastar dinero".

"Vimos las paredes de nuestra escuela bastante deterioradas, y dijimos: podemos empezar a restaurarlas. Después, un nene propuso hacer una campaña argumentando que en la escuela todos hablan de reciclar la basura, pero nadie lo hace. Entonces dijimos: hagámoslo, pero en serio. Luego surgió el tema de los chicos de la calle y de las escuelas carecientes. Entonces dijimos: hagamos una colecta de útiles", agregó la maestra.

Hacer antes que prometer

Tres partidos se constituyeron en cada uno de los 5° años: Fuerza Infantil (FI), Federación Escolar (FE), Compañeros Unidos (CU), Alumnos en Acción (AA), Alianza Infantil (AI) y Unión Escolar (UE).

"La idea era cambiar la forma de hacer política: las promesas a veces se cumplen y a veces no. Les propuse que demostráramos con hechos qué somos capaces de hacer: hacer antes que prometer", comentó la maestra.

Con ese lema, los chicos comenzaron a cumplir las promesas de campaña, que le cambió la cara y ciertas rutinas a la escuela: afiches, volantes, recorridas por los cursos, charlas y debates en los recreos.

"Esto se transmitió a los papás, y empezó algo que me desbordó, y fue el interés de ellos por la solidaridad que se generó en sus hijos: les decían que querían una sociedad más justa, más equitativa", explicó Mimí.

Docentes y estudiantes entendían que su escuela, aun con las paredes descascaradas, tenía "casi todo lo necesario". Pero los niños conocían casos (en sus propios barrios) de instituciones con techos caídos, donde faltaban hasta los lápices. "Preguntaban por qué hay chicos que sufren; no lo podían entender. Entonces decidimos ayudar para que eso cambiara", aclaró la docente.

En 15 días, se vieron los frutos del trabajo, que habían involucrado a padres, docentes y alumnos: cajas con ropa, útiles, juguetes y paredes con nuevos colores.

"Un sábado nos reunimos con mamás y papás, y con restos de pintura que ellos habían traído de sus casas se hicieron los murales. La cosa se contagió. Los chicos de 6° y 7° empezaron a preguntar qué pasaba. Les sugerimos pintar paredes, para ayudar a restaurar la escuela", sostuvo la docente.

Más inteligentes que los políticos

"La democracia es tomar decisiones, y eso es hacer política. No siempre tenés que ser presidente para formar parte de la política", argumentó Jesús, candidato a presidente escolar por Fuerza Infantil.

"Nos fuimos organizando, y le dimos a cada integrante un deber: algunos estuvieron encargados de sacar fotocopias para los carteles, otros de los votos, otros de conseguir los juguetes que íbamos a donar. Esas son las obras que ya hicimos. Ahí podés ver algunos de los donativos", agregó.

Sofía, candidata a presidenta de Alumnos en Acción, explicó que en su agrupación todos colaboraron para pintar dos murales "con motivos infantiles, que vos podés apreciar ahí atrás".

"Se pudo lograr eso porque nuestro lema es `Hacer antes que prometer', no como los políticos que prometen y tal vez hay cosas que no hacen. Por eso yo pienso que somos mucho más inteligentes que ellos, porque primero cumplimos y después prometemos", fundamentó Sofía.

Florencia, la candidata por Alianza Infantil, comentó que su propuesta fue donar útiles y juguetes a escuelas carecientes y al turno tarde de la escuela Beleno: "Queremos llegar a los niños carecientes, porque todos tenemos derecho a jugar, a tener un ambiente sano y limpio, y a estudiar. Queremos lograr eso".

Cosquillas en la panza

Ante una vieja urna de madera, una extensa cola de chicos esperaba votar por primera vez: "Es difícil aprender a votar. Fue la primera vez que entré a un cuarto oscuro y tuve una sensación de cosquilleo en la panza por los nervios", expresó una nena de 3er. año.

"Fue hermoso", dijo Florencia entre suspiros: "Pensar que recién dentro de 8 años vamos a volver a hacerlo. Cuando seamos grandes va a haber más candidatos, muchos más de los que tenemos nosotros ahora, y entonces va a ser difícil, estoy segura".

En las escaleras, un chico que volvía de votar relató: "Estaba nervioso, no sé por qué. Es la primera vez que lo hago. Los presidentes de mesa me explicaron cuáles eran las listas que habían hecho cada uno para postularse. Estaba muy interesado en venir".

"Todos tenemos un mismo lema, que es `Por una escuela mejor' -reflexionó Jesús. Somos todos compañeros. A cualquiera que gane, los demás lo vamos a apoyar, no nos vamos a pelear".

Sofía resumió el sentimiento y el espíritu de lo que estaban viviendo: "Salga el que salga, igual vamos a hacer felices a otros chicos, porque vamos a tener en mejores condiciones a la escuela. Si perdemos, el orgullo será que esas cosas que hicimos alguien las va a disfrutar".

Winnie Pooh

De las elecciones participaron 400 alumnos de 3°, 4°, 5°, 6° y 7°, además de docentes y directivos, ya que "la propuesta estaba vinculada con el mejoramiento de la escuela".

Los chicos debieron hacerse documentos para sufragar, elaborar los padrones, conseguir la urna, imprimir los votos, definir quiénes serían las autoridades de mesa y establecer los mecanismos para el recuento, una vez concluido el proceso electoral.

Los DNI se fotocopiaron y adornaron a gusto, y la imagen de Winnie Pooh fue elegida como motivo del sello que certificaría la emisión del voto. Las autoridades de mesa fueron dos alumnos de 7° año, seleccionados por las maestras, según su responsabilidad y seriedad, criterio que fue consensuado entre todos.

Lorena Menaker