A todo campo en el INTA de Concordia

Un gran número de productores, emprendedores agropecuarios, estudiantes, profesionales, representantes de varias instituciones, asociaciones, organizaciones y personas interesadas en la labor de investigación y extensión del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, se reunieron en la Estación Experimental Agropecuaria Concordia del INTA en una jornada a campo.

Durante esta visita, los ingenieros agrónomos, Rubén Díaz Vélez, Juan Mousqués y Sergio Garrán, explicaron distintos temas relacionados con la citricultura haciendo hincapié en las recomendaciones para el manipuleo de plaguicidas y para su aplicación, la verificación y el mantenimiento de pulverizadoras y la aplicación eficiente de plaguicidas.

Este encuentro estuvo organizado por la EEA Concordia del INTA, su Asociación Cooperadora y el Consejo Local Asesor de la misma.

Visión integral

Por otro lado, se expusieron los resultados obtenidos en la campaña del último año respecto de la verificación de 41 equipos pulverizadores y los ingenieros, Luciana Ingaramo, Ciro Mastrandrea y Eduardo Giorgio, junto con trabajadores de la Cooperativa Oro Verde y personal de campo del INTA, presentaron el área forestal.

Asimismo, se dirigieron al módulo hortícola, en donde los ingenieros agrónomos, Lilian Román y Carlos Barreto, mostraron las diferentes alternativas de cultivos de verduras de hoja (especialmente de tres especies: lechuga, espinaca y acelga) en invernáculos (bajo cubierta), a cielo abierto (a campo) y bajo mediasombra; los sistemas de siembra directos y en bandejas (maceta), los sistemas de protección en bajas y altas temperaturas y las siembras escalonadas en tales cultivos. A la vez que se expusieron los ensayos de frutilla realizados en el módulo, sus resultados y las distintas alternativas para su manejo en la zona.

En tanto, en la última parada se expuso sobre la relevancia del cultivo de arándanos en Entre Ríos y las líneas de acción de la EEA Concordia del INTA al respecto. Aquí, el contador, Luis Vera, remarcó dos aspectos a tener en cuenta para apreciar el efecto de la cadena del arándano en la zona y el elevado valor de la fruta que, principalmente, se destina a la exportación y la elevada demanda de mano de obra que genera el cultivo y en particular la cosecha.

Recorrida

Los asistentes también recorrieron el stand de floricultura, en el que la ingeniera, Elena Gagliano, se refirió a la importancia de la producción florícola en el país y la región, su crecimiento, la necesidad de la mano de obra intensiva y las actividades que desarrolla la experimental en estas especies de flores para corte, mencionando los primeros resultados registrados.

En la última parada, que está relacionada con la sección apícola del INTA, la médica veterinaria, Natalia Messina; y el ingeniero, Julio Krochik, explicaron sobre las actividades de extensión que se están llevando a cabo desde la

experimental por medio de la formación de grupos, la producción de miel argentina y entrerriana, destacando los productos que se obtienen de la colmena.