Charla a fondo con Luis Sauco, a casi 40 años del primer ascenso
Uruguayo de nacimiento, santafesino por adopción
El "Negro", como todos lo conocen, se reunió con El Litoral para recordar el ascenso del '66 con Unión. Además, compartió diversos conceptos y jugosas anécdotas.

ALBERTO SÁNCHEZ

Luis Ernesto Sauco Borges ("el segundo apellido era de mi vieja") fue uno de los integrantes de aquel plantel de Unión que ascendió en el año 1966, al consagrarse campeón de la vieja Primera B (pronto se cumplirá el cuadragésimo aniversario).

El Litoral no encontró escollo alguno por parte del protagonista, quien con puntualidad asistió a La Citi Sport, lugar fijado con anterioridad, en el cual saludó a varios amigos, entre ellos a don Arturo Nepote, padre del ex arquero Gustavo. -¿Quién te trajo a Unión, Luis? -Los que hablaron primero conmigo en Uruguay fueron don Ángel Malvicino y Osvaldo Kopp. Pero el que me convenció para venir a Santa Fe fue el "Pulpa" Etchamendi, quien me dijo que me necesitaba para ascender a primera con Unión. Vinimos desde Uruguay en el auto de él, una coupé Ford modelo '38 descapotable. Yo venía de jugar la final de la Copa Libertadores con Nacional, cuando perdimos contra Independiente. Llegar a Santa Fe para mí fue todo un desafío. -¿Con qué te encontraste cuando llegaste?-En Unión me encontré con excelentes dirigentes y una muy buena hinchada. Me acuerdo de lo que me dijo Etchamendi: "Mire, Luis, que a Unión vinimos para ser campeones porque el año pasado Pepe Etchegoyen salió campeón con Colón y ascendió, así que nosotros tenemos que plantar la bandera uruguaya y romperle la cabeza a cualquiera que se interponga". Era un tipo sensacional. Lo que más me sorprendió de esta ciudad fue que era muy parecida a Montevideo, lo mismo que su gente. -¿Dónde vivías?-En la pensión de Doña Berta Brandt, que era como un policía, hasta las llamadas telefónicas nos controlaba. La pensión estaba en Saavedra al 3400. Ahí estábamos con el "Pulpa" Etchamendi, Iglesias, Asencio y varios muchachos más. Éramos todos profesionales que jugábamos en la primera de Unión, todo lo contrario de lo que pasa ahora porque, hoy en día, los que no son de Santa Fe viven en un hotel o en una casa, tienen gas natural, televisión, aire acondicionado, calefacción, etcétera. Nada que ver con aquella época.

El ascenso está en marcha

-¿Cómo fue tu debut?

-No me fue muy bien que digamos. Llegué a Unión con ocho kilos de más, pero el profesor Hurtado me dejó una pinturita en poco tiempo. En ese entonces, el profe era uno de los mejores preparadores físicos del país. El primer partido que jugué fue contra Central Córdoba, un amistoso que empatamos en nuestra cancha y yo erré un penal.

-¿Y en el torneo oficial?-Bastante mejor. La primera fecha del torneo nos tocó justo contra ellos en Rosario y ganamos 2 a 1. Con el correr de los partidos fuimos mejorando en el juego, ganando casi siempre acá y sacando buenos resultados de visitante, hasta que llegamos peleando el campeonato con All Boys. -Era un buen equipo ese de All Boys, ¿no?-Si, seguro. Tengo una anécdota muy linda con respecto a All Boys, resulta que tenía un arquero uruguayo de apellido Novasco al que le decían el "Púa". Yo lo conocía pero no sabía por qué le decían así. Cuando llegó el día del partido, el "Pulpa" nos dijo: "A Novasco tírenle a la derecha que le falta un dedo de la mano". Pobre "Púa", al final ganamos 3 a 1, pero atajó muy bien. La clave por la cual ganamos ese partido fue el "Nene" Gómez. Resulta que All Boys tenía un jugador de apellido Fernández que era la figura de ellos. En una jugada, el "Nene" le fue tan fuerte que desapareció de la cancha y a partir de ahí levantamos nosotros, les metimos tres goles y salimos campeones. íQué bravos que eran esos torneos de ascenso...!-Eran mucho más difíciles, no había la organización que hay ahora en cuanto a campos de juego, cuidado del jugador, utilería. Antes, cada uno preparaba su bolso. Cuando jugábamos en Buenos Aires, el colectivo nos dejaba a dos o tres cuadras del club y llegábamos a pie hasta la cancha entre los hinchas locales, sin un policía que nos escolte. Nos gritaban: "Inundados, les vamos a romper el c...". No te imaginás lo que era ir a Dock Sud, Tigre o San Telmo. En cambio, cuando los otros clubes venían a Santa Fe, la hinchada de Unión no hacía lo mismo, el unionista se dedicaba sólo a alentarnos. -¿Qué diferencias encontrás entre los torneos de antes y los actuales?-Es que antes el nivel futbolístico era muy diferente entre algunos equipos y otros. En cambio, hoy son todos muy parejos y cualquiera gana o pierde con cualquiera; con una buena racha podés convertirte en candidato para ascender. El caso de San Martín de San Juan con Toresani es uno de ellos, el plantel es el mismo y llegó el "Huevo" y le cambió la cara.

El padre de la criatura

-Definímelo a Washington Etchamendi.

-El "Pulpa" era un tipo bárbaro. Una vez un dirigente quiso armarle el equipo... íNo sabés como se puso! Resulta que la dirigencia quería limpiar a Tremonti porque había atajado en Colón y, según ellos, no estaba cumpliendo: "¿Quién m... son ustedes para decirme quién va a jugar y quién no? Acá el el técnico soy yo". Y al final, Tremonti siguió atajando.

-¿Por qué no los dirigió en primera? -No sé, es algo que se le puso a él; me acuerdo de que me había dicho que venía a Santa Fe para sacar campeón a Unión y después se iba. Al final, cumplió, ya que en primera no nos dirigió, nos fue muy mal, y descendimos ese mismo año. El partido que definió nuestra vuelta a la "B" fue contra Los Andes en Lomas de Zamora. Nunca me voy a olvidar del árbitro Luis Pestarino. En una jugada en la cual no le cobró un claro penal a Pedro Mansilla, fui a reclamarle y me dijo mientras me abrazaba: "No te preocupés, negrito..., cuando vaya a Santa Fe te cobro uno". Fue lo peor que me dijo un árbitro en toda mi carrera. -¿A quiénes considerás tus amigos de aquel plantel del '66?-Es muy difícil nombrarlos a todos, quizás me olvide de alguien o incluya a alguno de otro plantel. Pero, sin dudas, mis mejores amigos fueron el "Nene" Gómez, Casal, el "Chango" Ruiz, Garzón, "Bolita" Primón, Ramón Zanabria, Hugo Francisco Figueroa.