Cartas a la Dirección

Agradecimiento

Señores directores: Quiero agradecerles por este medio a todo el personal de Terapia Intensiva del Hospital José María Cullen, médicos especialistas, enfermeros, mucamas. Por haber asistido a mi hija Virginia Inés Abbondanza en un lamentable accidente, el día 28/03/06, donde fuera atropellada, por el cual perdió la vida.

Al personal del Cobem y al 107, al Dr. José del Sastre haciendo todo lo posible. Al padre Luis, de la capilla del hospital, por contenernos y consolarnos en esos duros momentos, con oraciones y plegarias. Al señor Valenzuela, personal de seguridad, gracias por haber conocido a Vicky y ser su amigo. A nuestros familiares, amigos, vecinos personales, profesionales y empresarios, a todas aquellas personas que no conocemos, pero que hicieron cadenas de oración, pidiendo por ella, nuestra sincera gratitud. A los innumerables amigos, compañeros de trabajo, jefes de la empresa empleadora, ex jefes y ex empleados. A los maestros y profesores del primario escuela Escalante, secundario Almte. Brown y facultad, muchas gracias. En especial a Dante Tosi, fiel amigo incondicional, que sostuvo la mano de Vicky en ese momento, se lo agradezco de corazón. A los Dres. Caroliche, Perello y a la Dra. Ocampo, por haber concurrido a mi llamado desesperado. Al padre Zanello, por rezar y contenernos a toda la familia, en esta aflicción tan dolorosa. También ruego elevar una oración y pedir a Dios que Vicky descanse en paz, en el reino celestial.

Inés Abbondanza - LC: 6.367.920. Ciudad.

Polémica Ley del Donante Presunto

Señores directores: Hace tiempo, en una carta a vuestro diario, publicada el 18 de marzo de 2004, expresaba mis dudas y temores acerca de la Ley del Donante Presunto. El tiempo me da la razón. Se ha implementado esta ley, en un marco de total desprolijidad, tal como yo temía.

En los organismos del correo no están los formularios de los telegramas que gratuitamente deberían estar a disposición de quienes no deseen donar sus órganos.

Por otra parte, la Policía Federal, el Registro Civil, etc, entes responsables de su aplicación, no tienen directivas, en resumen, no conocen la ley. Cabe agregar que tampoco se sabe con certeza la actual dirección del Cudaio; no es la que figura en la guía telefónica, tampoco funciona ya en el hospital Cullen. Pese a todo, se ha comenzado con la ablación de órganos, considerando "donantes presuntos" a quienes no dejaron la constancia escrita en dichos sitios.

Si a esto sumamos que exceptuando vuestro diario, no se realizó campaña informativa al respecto, la conclusión es que hay gente que no sabe cómo hacer para poner a resguardo sus restos.

Esto configura una situación realmente coactiva para un amplio sector de la población, al no cumplirse con los ítems de la ley, que le permiten hacer valer sus legítimos derechos.

Ing. Lidia E. Montagnini - LC: 3.555.199. Ciudad