Lo pidió el Banco Mundial
Las pasteras aceptaron que se hagan más estudios ambientales
Botnia y Ence comunicaron oficialmente su disposición a "brindar asistencia" para que se amplíen las indagaciones, sobre el impacto ambiental que producirán las plantas a construir en la costa uruguaya.

EFE/DyN/El Litoral

Las empresas Botnia y Ence afirmaron que están preparadas para aportar la información adicional que requiera el Banco Mundial, acerca de las plantas de celulosa que se construyen en Uruguay y han originado un conflicto con Argentina.

En un comunicado difundido en Montevideo, la finlandesa Botnia afirmó que ha acordado con la Corporación Financiera Internacional (CFI), la rama del sector privado del Banco Mundial, "la realización de más estudios sobre los impactos ambientales combinados de las plantas de celulosa que se construyen en Uruguay".

Botnia consideró "positivas las propuestas presentadas por los expertos canadienses, contratados por la CFI". La empresa afirmó que "está dispuesta a brindar asistencia para realizar los estudios adicionales. Botnia siempre ha sido líder en asuntos ambientales", indicó.

"Tenemos una actitud positiva ante las propuestas realizadas por los expertos contratados por la CFI con respecto a llevar a cabo estudios adicionales sobre los impactos ambientales de la planta de celulosa", añadió el informe.

"Estamos prontos para proporcionar toda la información que sea necesaria para asegurar que Botnia va a aplicar las mejores tecnologías disponibles en su planta de Uruguay", dijo el presidente y director ejecutivo de la empresa, Erkki Varis, en el comunicado.

Ence también

Horas antes, el grupo español Ence había señalado que no "prevé dificultades" para cumplir con las acciones establecidas en el plan de acción difundido el martes por la CFI.

Ence "valora positivamente" que se ingrese a la fase final del proceso de evaluación ambiental, "de modo de confirmar que la planta se ajusta a los requerimientos del Banco Mundial", indicaron altas fuentes de la empresa.

Los representantes de la empresa destacaron, además, su "confianza plena" en el proceso que se inicia y en que el mismo "satisfaga a todas las partes".

Señalaron que el Estudio de Impacto Acumulativo Final que se presentará al cabo de este proceso será el "análisis complementario que algunas partes han venido reclamando".

La empresa española se encuentra actualmente dedicada a tareas en el parque industrial que rodea la planta de celulosa y a trabajos previos a la instalación del equipamiento.

El cronograma de trabajos tuvo un reajuste debido al enfrentamiento entre los gobiernos de Uruguay y Argentina, pero "se mantiene el cronograma global" y Ence espera tener su planta en fase de pruebas en el primer semestre de 2008.

Con marco de conflicto

La Corporación Financiera Internacional anunció un plan de acción para la evaluación ambiental y social de los proyectos para la construcción de las plantas de celulosa de Ence y la finlandesa Botnia.

La pasada semana, el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, visitó la sede del BM y solicitó a las autoridades que aceleraran el proceso de estudio de solicitud de créditos presentado por las empresas.

Ambas plantas se construyen en las proximidades de la ciudad de Fray Bentos, departamento de Río Negro, a orillas del río Uruguay, límite natural con Argentina y frente a las costas de la provincia argentina de Entre Ríos.

La construcción de las plantas supone la mayor inversión conjunta en la historia de Uruguay, 1.800 millones de dólares, 1.300 de Botnia y 500 millones de Ence, y para financiar parte de las obras ambas empresas solicitaron préstamos al Banco Mundial.

La CFI anunció que adoptará recomendaciones de los expertos independientes canadienses Wayne Dwernychuk y Neil Mc. Cubbin, que identificaron la necesidad de ofrecer información adicional y análisis para determinar los impactos ambientales de las plantas que aspiran a su financiación. Los expertos también recomendaron diversas mejoras técnicas que optimizarían la operación ambiental de ambas plantas.

El gobierno argentino presentó una denuncia contra el uruguayo en la Corte Internacional de La Haya, por presuntas violaciones de tratados bilaterales. Las autoridades argentinas y vecinos de la provincia de Entre Ríos se oponen a la construcción de las plantas de celulosa, con el argumento de que causarán contaminación al medio ambiente de la zona, lo que es negado por las autoridades uruguayas y las empresas.

Rechazo

El juez federal de Concepción del Uruguay, Guillermo Quadrini, no hizo lugar a otra de las medidas cautelares solicitadas por el gobernador Jorge Busti en la causa por daño ambiental en grado de tentativa que impulsa contra las empresas que construyen papeleras en Uruguay. Para el juez la medida cautelar era "incorrecta" porque "recién se está investigando" el caso y de lo único que hay certeza aún es de la "sospecha" por posible contaminación.