Debate científico sin resultados a la vista
¿Por qué los huracanes son cada vez más frecuentes e intensos?
Comprar una casa frente a las playas de Cancún o de Palm Beach ha perdido parte de su atractivo por el aumento de la frecuencia y la intensidad de los huracanes, pero los científicos aún no se han puesto de acuerdo sobre su causa.

Los expertos saben dos cosas: que los ciclones son más poderosos ahora que en el pasado y que ha subido la temperatura del agua superficial en los océanos.

"Se cree que ese cambio en la intensidad está directamente asociado al cambio en la temperatura del mar", explicó a EFE Carlos Hoyos, un científico colombiano del Instituto de Tecnología de Georgia.

A partir de ahí no hay acuerdo. Una parte de la comunidad científica apunta el dedo al ser humano y cree que el calentamiento global, provocado por las emisiones de dióxido de carbono, ha elevado la temperatura en los mares.

Otra afirma que la subida de grados en la superficie del agua es parte de un ciclo natural.

En todo caso, ambas posturas coinciden en que el mayor nivel de actividad de huracanes "va a seguir por lo menos durante la próxima década", según Hoyos.

El gran ciclón de la temporada pasada fue Katrina, que arrasó Nueva Orleans y causó daños por valor de unos 80.000 millones de dólares.

No obstante, ese huracán no fue un caso aislado. El número de huracanes que ha alcanzado las categorías cuatro y cinco -las máximas en la escala de intensidad Saffir-Simpson- se ha duplicado en los últimos 35 años, según un estudio realizado por el equipo al que pertenece Hoyos.

El año pasado hubo 28 tormentas tropicales en el Atlántico, cuatro de las cuales se transformaron en huracanes de categoría cinco, lo que constituye un récord.

En los próximos años no se multiplicarán los huracanes, pero los que se formen serán más potentes, según explicó a EFE el mexicano Marín Medina Elizalde, de la Universidad de California.

La razón radica en que los "motores" de los ciclones cuentan hoy en día con más combustible, en forma de agua caliente.

La temperatura de la superficie marítima en los trópicos ha aumentado 0,6 grados centígrados desde 1970, lo que puede parecer poco, pero sobre una gran extensión supone una cantidad mucho mayor de líquido susceptible de ser absorbido por los vientos circulares del huracán.

Medina Elizalde y sus colegas en el programa de Ciencias Marinas de la Universidad de California creen haber demostrado que ese aumento de temperatura del océano se debe a los humos que salen de las fábricas y los tubos de escape de los automóviles.

"La única explicación que tenemos es que las temperaturas varían debido a que hay más gases de efecto invernadero", explicó.

Tras analizar el aire contenido en el hielo, su equipo ha concluido que el nivel actual de dióxido de carbono en la atmósfera es el mayor en los últimos 650.000 años.

Sin embargo, no ha convencido a todos los escépticos, muchos de los cuales ocupan altos cargos en el Centro Nacional de Huracanes (CNH) y la Dirección Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA, en inglés) del gobierno de EE.UU.

El asunto es muy polémico, ya que Estados Unidos es el país más contaminador del mundo.

Tan pronto como llegó a la Casa Blanca en 2001, George W. Bush retiró la firma de su país del Protocolo de Kioto, que restringe las emisiones de gases a la atmósfera, con el argumento de que no se sabe si la razón del calentamiento global es la acción humana y que el tratado perjudica el crecimiento económico.

"Es muy probable la influencia política en el pensamiento de algunos científicos", dijo, por su parte, Hoyos.

No obstante, tampoco la Organización Meteorológica Mundial (OMM) se arriesga a explicar el porqué los huracanes han ganado fuerza en los últimos tiempos.

Su secretario general, Michel Jarraud, ha afirmado que no existe aún evidencia de que la "excepcional devastación de los últimos años" esté relacionada con el calentamiento del planeta.

Los científicos esperan poder contar con pruebas más definitivas en los próximos años, pues hasta ahora no ha habido muchos estudios sobre el tema, según Medina Elizalde.

En todo caso, en este ambiente huracanado, ya hay que envidiar menos a los que se van de vacaciones a su casa en una playa del Caribe.

César Muñoz Acebes (EFE)