En junio, 1,69 metros por debajo del promedio en Santa Fe
Los ríos sudamericanos siguen con poco caudal por falta de lluvias
El Paraná en su tramo medio mantiene niveles inferiores a los registros habituales en los últimos 25 años. Las precipitaciones son escasas tanto en Brasil como en territorio argentino.

De la redacción de El Litoral

Las bajas precipitaciones de los dos últimos años en la cuenca hidrológica del continente sudamericano vienen repercutiendo en los niveles de los ríos de la región, que muestran alturas inferiores a los promedios de los últimos años. Así lo destaca un informe del Instituto Nacional del Agua (INA), que releva la zona con datos de diversa procedencia.

El río Paraná en Brasil viene mostrando bajos niveles. El último cuadro de lluvias analizado por el INA (27/jun al 3/jul) mostró nuevamente escasos montos acumulados, sin registros significativos. Y los pronósticos siguen en la misma línea.

Los niveles de embalse de la alta cuenca muestran una tendencia descendente, leve pero sostenida. Las descargas, en general, mantienen también una muy leve tendencia descendente. En el embalse de Jupiá, aguas abajo de la desembocadura del río Tieté, la descarga media semanal disminuyó de 7.000 m3/s al orden de 5.500 m3/s.

En Guaira, cola del embalse de Itaipú, el caudal medio semanal se mantuvo en el orden de los 9.500 m3/s. Desde el 14 de febrero de 2005 no supera los 15.000 m3/s. En Itaipú, la descarga media semanal fue de 9.900 m3/s, valor muy similar al anterior. El caudal esperado es de unos 10.100 m3/s. Se espera que se mantenga sin tendencia definida en el corto plazo. El embalse de Itaipú mantiene su nivel oscilante muy próximo a su nivel normal.

Sobre la cuenca del Iguazú, las precipitaciones son moderadas y los caudales promedio (en Salto Caixas 400 m3/s, en Capanema 520 m3/s) se mantienen estables. En Andresito, el nivel medio semanal decreció de 0,12 m a 0,08 m. En junio presentó un nivel medio de 0,21 m, es decir 1,15 m por debajo del valor normal. El caudal medio descargado al río Paraná en junio promedió 560 m3/s, en el orden de la cuarta parte del valor normal.

En el Paraná

El río Paraná, tramo paraguayo-argentino, repite el escenario de lluvias poco significativas. En la confluencia Paraná-Iguazú, el caudal promedio semanal fue de unos 10.400 m3/s, valor muy similar al anterior. La perspectiva descarta un repunte significativo en el corto y mediano plazo. La escala de Puerto Iguazú, muy próxima a la confluencia, registró una lectura media semanal de 11,20 m, levemente mayor que la anterior. En junio promedió 11,27 m, es decir, 2,72 m por debajo del valor normal, considerando los últimos 25 años.

En el río Paraguay, el caudal descargado actualmente al Paraná se mantiene en 3.100 m3/s, un 48% por debajo del valor normal. En el tramo medio del Paraná, los niveles del río fueron en junio más bajos que el promedio de los últimos 25 años: -1,76 m en Corrientes, -1,43 m en Goya, -1,42 m en La Paz, -1,69 m en Santa Fe y -1,63 m en Rosario. El curso de agua presenta, así, niveles bajos similares a los observados en junio/julio de 2001.

Para el tramo inferior y delta del Paraná, el INA verifica un aporte fluvial levemente descendente, efecto al que se sumó el de la persistente bajante en el estuario. En la próxima semana se observaría una situación estable, con escasas variaciones significativas.

En términos medios, en San Nicolás el apartamiento respecto del nivel normal de junio fue de -1,39 m, considerando también los últimos 25 años.

También el Uruguay

En el río Uruguay la situación no es distinta. El caudal de ingreso al tramo compartido argentino-brasileño era, el pasado 4 de este mes de 700 m3/s, estable. En las estaciones de Santo Tomé y Paso de los Libres, el caudal medio semanal habría alcanzado los valores de 1.300 m3/s y de 1.900 m3/s, respectivamente, aumentando la primera en 500 m3/s respecto a la semana anterior y la segunda, en 1.000 m3/s.

El aporte medio semanal al embalse de Salto Grande alcanza los 2.250 m3/s, aumentando 800 m3/s, mientras que la descarga media ascendió a valores de 2.800 m3/s, 1.000 m3/s más que la semana anterior.

En Concordia, la media semanal creció unos 68 cm con respecto a la semana anterior, alcanzando 2,30 m. Y en Puerto Gualeguaychú se registró el 4 de este mes una altura de 0,60 m. La media semanal fue de 1,24 m, inferior a la de la semana anterior en 51 cm.

En la represa

Yacyretá mostró indicadores que confirman la tendencia general en el nivel de los ríos. La descarga media semanal fue a principios de este mes de unos 10.900 metros cúbicos por segundo (m3/s), valor muy similar al de la semana anterior. Se espera que evolucione con tendencia levemente descendente en el corto plazo. En el mes de junio promedió 11.250 m3/s, en el orden de un 24% por debajo del normal para el mes.

Nivel crítico para navegar

El informe del INA prevé que para el período julio-setiembre la altura del Paraná en el tramo medio observará "oscilaciones acotadas de nivel, dentro de niveles bajos respecto de los normales para esta época del año".

Pero, más aún, para el tramo inferior del río y su delta, anticipa que, "dadas la situación hidrológica actual y la perspectiva climática, se prevé (para el mismo trimestre) que los niveles evolucionen muy por debajo de los normales. Las condiciones para la navegación fluvial no mejorarían en forma sensible, pudiendo registrarse niveles críticamente bajos".

En coincidencia con los informes de Climagro que viene reflejando El Litoral, y que anticipan que las lluvias sólo se normalizarían entrada la primavera, el informe del INA también mide la incidencia de la temperatura del Pacífico, que determina en buena parte el ingreso de humedad en el cono sur.

El enfriamiento oceánico determinó las escasas precipitaciones en los dos últimos años. Ahora, según el INA, la temperatura del Pacífico muestra una "neutralidad" "que perdurará durante los próximos tres meses", por lo que "se esperan precipitaciones normales o por debajo de lo normal en gran parte de la cuenca de estudio."

Admite el Instituto Nacional del Agua que hay algunos pronósticos de un fenómeno débil de El Niño para la segunda mitad del año (se calienta el Pacífico e ingresa más humedad). Pero, aun así, señala que es más probable que continúen las bajas precipitaciones hasta fin de año.

En este marco, señala que para el río Paraguay "sigue sin preverse una recuperación importante para el siguiente trimestre en la cuenca. El 2006 se define como año seco, continuidad del ciclo comenzado en 1999.

"Con respecto al río Paraná -añade-, dadas la situación hidrológica actual y la perspectiva climática, se prevé para el período julio-setiembre que los niveles evolucionen muy por debajo de los niveles normales".

Expone que "las condiciones para la navegación fluvial no mejorarían sensiblemente en el período mencionado, pudiendo durante este período registrarse niveles críticamente bajos".

En el río Uruguay, "con la perspectiva climática vigente de precipitaciones que no superarían los valores normales en las cuencas media y alta", siempre en el trimestre mencionado y tomando en cuenta "la condición de déficit en toda la cuenca", el INA pronostica "la permanencia de niveles inferiores a los valores normales en el río".

Incluso, advierte también para este caso que "no se descarta la ocurrencia de niveles críticamente bajos en el tramo inferior" del cauce fluvial que divide los territorios de la Argentina y Uruguay.