La Secretaría de Trabajo informó que en el primer semestre de 2006, en el territorio santafesino, se realizaron 2.680 inspecciones en las que se constataron 11.238 trabajadores que estaban en forma ilegal, de un total de 17.416 trabajadores. Es decir que los agentes no registrados alcanzaron un 64,53% sobre lo verificado.
Durante las actuaciones administrativas los empleadores procedieron a la registración del 76.05% de ellos (8.547 trabajadores) quedando "en negro" 2.691, o sea el 23.95%.
El vínculo precario entre empleadores y empleados atenta contra la productividad y competitividad de las empresas, por eso el objetivo de mejorar la protección de los trabajadores.
La Secretaría sostiene que el trabajo "ilegal" implica evasión de aportes y una competencia desleal, que el Plan Nacional de Regularización del Empleo, llevado adelante por los gobiernos nacional y provincial tiene por objeto combatir.
El organismo aclara que los logros obtenidos en la provincia son el fruto de la constante y firme política llevada por el gobierno de Jorge Obeid, que se ve reflejada en la presencia y control de la Secretaría de Trabajo. Esta tiene la finalidad concreta de conseguir la regularización del trabajo, por encima de fines recaudatorios, lo que ha sido asumido claramente por los empleadores.
