A las ocho de la mañana, la promotora del Centro de Salud del Movimiento Los Sin Techo de Villa Oculta -barrio lindante a Villa del Parque- llegó a su lugar de trabajo habitual para comenzar con las actividades diarias.

Sin embargo, ni bien llegó, se encontró con que la puerta de entrada había sido violentada con anterioridad y, al parecer, en un horario en que nadie pudo haber observado ni escuchado mientras se producía el robo.

Entre los faltantes, la coordinadora del Centro, manifestó que se llevaron 60 kg. de leche en polvo -en 60 cajas de 1 kilo- y una serie de medicamentos -como ser vitaminas, desparasitantes y amoxilinas- destinados a la población infantil del barrio.

"Aún no hicimos el recuento de medicamentos pero cuando comparemos la cantidad que teníamos el lunes, que fue cuando atendió el pediatra, sabremos cuántos y qué remedios se llevó el que hizo esto", dijo Viviana, la coordinadora. Y agregó que por mes la provincia les entrega una partida de 200 kg. de leche y, si bien 140 cajas fueron retiradas, les quedaban 60 por entregar.

"Por lo general, la partida de leche no nos alcanza para toda la gente del barrio dado el número de chicos con bajo peso que hay. Toda la partida que nos llegó estaba destinada; lo que implica que con este robo 60 madres se quedarán sin la caja de leche para sus hijos", señaló la mujer. El motivo: es muy probable que no reciban una nueva partida -ni de leche ni de medicamentos- ya que cuando ocurren hechos de similares características no se acostumbra, por parte del gobierno, reponer lo robado.

Sobre quién pudo haber cometido el terrible hecho -por lo que implica que las criaturas del barrio no tengan su leche-, Viviana sostuvo que"no pueden asegurar que fue la misma gente de Villa Oculta". De cualquier manera comunicó que la denuncia fue radicada y, de hecho, la policía ni bien tomó conocimiento del caso se acercó al lugar.

Este Centro de Salud ya fue víctima de robos. En una oportunidad anterior, de acuerdo a lo informado por Viviana, los delincuentes se llevaron instrumentos médicos que tuvieron que ser suplantados por el Movimiento.

"En este robo, por suerte, no se llevaron la balanza, el tensiómetro o el nebulizador. Si hubiese ocurrido eso, es el Movimiento que encabeza el padre Rosso el que debe reponerlos", dijo.

"Del arreglo de la puerta sí vamos a tener que hacernos cargo. Pero lo peor es que cuando vengan las madres vamos a tener que decirles que no tenemos la leche de sus hijos porque se la robaron", agregó.