Estadísticas del hospital Cullen
Consecuencias de no prevenir los accidentes de tránsito
Los médicos observan que no solamente el estado de salud es grave al momento de ser asistidos en terapia intensiva, también quedan muchos con grave secuelas. Foto: Archivo El Litoral. 

En el último mes y medio fueron internados en la terapia intensiva del Cullen 26 pacientes graves, como consecuencia de presentar politraumatismos luego de haber sufrido un accidente de tránsito. En su mayoría eran hombres, de unos 30 años, que conducían motos, no llevaban casco y/o estaban alcoholizados.

Mariana Rivera

Cuando se habla de accidentes de tránsito pocos ponen el acento en insistir en la importancia de la educación de la población para poder evitarlos. No remarcan que transgredir las normas de tránsito trae consecuencias fatales para muchos santafesinos, mientras que en otros dejan marcas de por vida.

En los últimos 34 días ingresaron a la terapia intensiva del hospital Cullen de nuestra ciudad 26 pacientes politraumatizados graves, es decir, casi uno por día. Fueron pacientes jóvenes (80% hombres, con una edad promedio de 29 y 30 años), que sufrieron accidentes de tránsito a bordo de una moto y, en su mayoría, estaban alcoholizados. Otro dato fundamental es que no tenían casco, es decir, no cumplían con las mínimas normas de seguridad para conducir ese vehículo.

Los sucesos ocurrieron generalmente los fines de semana y los pacientes que debieron ser internados en el Cullen vivían en nuestra ciudad y otros eran del centro-norte de la provincia.

Los Dres. Rafael Ávila y Carlos Castarataro, jefes de la terapia intensiva del hospital Cullen, dialogaron con El Litoral en relación con las estadísticas que vienen manejando desde julio, cuando el servicio pasó a formar parte de un grupo de hospitales (50 en todo el país) que comparten una base de datos que apunta a mejorar la calidad de atención de los pacientes.

Consultados en relación con estas estadísticas, los profesionales indicaron que "desgraciadamente la patología más frecuente que recibimos es el politraumatismo. Son pacientes muy graves, muy jóvenes, con mucha perspectiva de vida y que quedan con discapacidades muy grandes, que no les van a posibilitar su desarrollo biofísico pleno".

Advirtieron que "una persona no puede superar haber nacido con un aneurisma cerebral o haber tenido una genética para tener un cáncer. No se pueden prevenir, pero un accidente sí. Además, el 80% de los politraumatizados son hombres y no mujeres, sobre todo en nuestra ciudad, que son padres y sostenedores de familia, reproductores, con todo lo que eso significa".

Trabajo en equipo

El hospital Cullen es el único lugar público en donde se puede encontrar un nivel I de terapia intensiva porque atiende pacientes de alta complejidad. Este servicio también asiste a los pacientes que fueron sometidos a grandes cirugías (como neurocirugías o cirugías abdominales) y, en menor proporción, pacientes clínicos graves.

En este sentido, Ávila y Castarataro aclararon que "si bien estamos a cargo de la dirección de la terapia intensiva desde el 1° de julio, el servicio ya contaba con tecnología de punta como para estar dentro de ese nivel. Nosotros continuamos con esta actividad, sumamos experiencia y conocimientos y empezamos a registrar los sucesos diarios a través de esta base de datos, para ir mejorando día a día, buscando la calidad total sobre los pacientes".

El servicio cuenta con dos responsables y dos médicos de guardia 24 horas, además de un equipo especializado en soporte nutricional (integrado por tres médicos), una infectóloga y un kinesiólogo respiratorio (que atiende a los pacientes con problemas respiratorios severos).

Los profesionales destacaron la importancia del trabajo en equipo para asistir a estos pacientes en estado de gravedad. Aseguraron que "el 51% del éxito de los pacientes pasa por la enfermería porque requieren altísimos cuidados. Por suerte, contamos con un personal muy joven y predispuesto a la mejora continua, lo que ha sido un pilar muy importante".

Sin embargo, agregaron que "a esto le sigue el personal de Kinesiología porque el 87% de nuestros pacientes está con asistencia respiratoria mecánica, es decir, necesita un respirador, lo que habla de la gravedad del paciente". Adelantaron que están haciendo gestiones para mejorar la cantidad de estos profesionales o incrementar sus horas de trabajo, por las necesidades del servicio.

Buenas perspectivas

Los jefes de la terapia intensiva del Cullen aseguraron que esta nueva organización en el trabajo permitirá bajar la tasa de mortalidad de los pacientes, que actualmente es del 30%, "lo habitual o mucho menor si se compara con las tasas internacionales y por la gravedad de los pacientes que tenemos, pero siempre queremos mejorar y estar por debajo de ese porcentaje", opinaron.

También precisaron que intentan disminuir el índice de discapacidad con que los pacientes salen del servicio, ya que "los politraumatizados de terapia intensiva siempre se van con alguna secuela por el hecho de haber pernoctado en una sala de cuidados donde el tratamiento es agresivo, pero es de máxima necesidad", indicaron.

Por último, remarcaron que -gracias al trabajo comprometido del equipo del servicio- consiguieron "mejorar mucho en disminuir la tasa de infecciones intrahospitalarias, ya que tenemos un índice muy bajo, sorprendentemente comparado con la media nacional e internacional. Estamos convencidos de que trabajar en grupo es la única forma en que se pueden solucionar los problemas del paciente".

Al respecto, agregaron que el equipo no es sólo el de puertas adentro de la terapia intensiva sino que también trabajan con otras especialidades muy conexas, como neurocirujanos, cirujanos generales, traumatólogos, angiografistas, entre otros servicios críticos.

En tanto, concluyeron mencionando que el servicio se organizó de esta manera "porque estuvo la decisión política de implementar las medidas necesarias para conseguir la mejora continua en la atención en terapia intensiva y en todo el hospital, al igual que en otros. Lo que estamos implementado sucedió gracias a que la dirección y el ministerio dispusieron que se ponga en práctica".

Cifras alarmantes

- En nuestro país, 19 personas mueren por día como consecuencia de accidentes de tránsito, es decir, que cada diez días ocurre un fenómeno Cromagnon, donde fallecieron 194 jóvenes.

- Argentina cuenta con el índice más alto de Sudamérica de accidentes de tránsito en relación con la cantidad de población, incluso más alto que Brasil que tiene mayor cantidad de autos.

- Los accidentes de tránsito son la primera causa de muerte en el país, mientras que en algunos países de Europa es la novena causa y va a ser la tercera para el 2020.

- El gasto público de nuestro país en accidentes viales es del 2% del PBI.

- El 80% de los pacientes de la terapia intensiva del Cullen son hombres, de entre 29 y 30 años, politraumatizados por accidentes en moto, los que -en su mayoría- conducía alcoholizado. Son pacientes graves que necesitan, en un 80%, estar conectados a un respirador.

Organización interna

El hospital Cullen comparte con otros 50 establecimientos de salud del país una base de datos, que permite hacer el seguimiento y ver la evolución de la terapia intensiva, tanto del paciente individual como del servicio en sí.

Se trata del SATI-Q (Sistema Informático de Seguimiento y Gestión de Pacientes), que pertenece a la Sociedad Argentina de Terapias Intensivas, programa que apunta al mejoramiento de la calidad de estos servicios.

Los Dres. Ávila y Castarataro, responsables de la terapia del Cullen, aseguraron que "esta base de datos nos permite saber qué cantidad de pacientes hay, su calidad, su gravedad, cuáles son los requerimientos de enfermería, cuál es la tasa de infecciones y la de utilización de recursos. Es decir, nos permite tener el registro de lo que diariamente está sucediendo y, por lo tanto, documentar lo que se hace".

Asimismo, recordaron que "en 2001 salió una disposición del Ministerio de Salud de la Nación por la cual se establecía la normatización del funcionamiento de las terapias intensivas. Agrupa a las terapias en diferentes niveles: I, II y otro de recuperación".

Explicaron que "la del Cullen es una terapia del nivel I, el mayor, en donde el jefe o coordinador es especialista en terapia intensiva, incluso deberían serlo algunos médicos de la guardia", sugirieron.

Tras advertir que existen muy pocos lugares de formación en esta especialidad en el país (sólo Buenos Aires, Córdoba y Rosario), recordaron que desde hace aproximadamente un año se implementó un curso de capacitación y especialización en terapia intensiva, junto con el Colegio de Médicos de Santa Fe. Actualmente, cuenta con 33 alumnos con buen nivel clínico y médico.