Estaría al margen de la ordenanza N° 10519/99

Guadalupe: obra de cloacas no tendría autorización municipal

En Talcahuano al 8100 se está terminando la estación elevadora. Foto: Eduardo Salva.. 

La obra de cloacas iniciada en marzo en Guadalupe Central que financia la provincia de Santa Fe a través del Ministerio de Asuntos Hídricos no contaría con la autorización municipal correspondiente junto con otros incumplimientos.

El 28 de febrero el Ministerio de Asuntos Hídricos de la provincia de Santa Fe anunció la adjudicación de una obra de desagües cloacales que beneficiaría a 2.000 habitantes del barrio Guadalupe Central y específicamente a quienes viven dentro del sector comprendido por las calles Berutti-French, al norte; Matheu, al sur; Riobamba, al este; y las vías del Ferrocarril Belgrano, al oeste.

La obra, como informó El Litoral en su momento, se enmarca en un programa que el gobierno encaró en materia de saneamiento sanitario para Rosario, Rafaela y Santa Fe. En nuestra ciudad, la adjudicataria de los trabajos -que demandaron una inversión de $1.948.174,33 y fueron fijados en un plazo de seis meses de ejecución- fue la empresa Coemyc SA.

Ahora bien, ¿qué establece la ordenanza municipal N° 10519/99 vinculada a las condiciones a la que deben ajustarse "los organismos públicos y/o privados, y/o sus empresas contratistas, que efectúen trabajos en la vía pública"?

Al respecto, la reglamentación estipula que todos "los organismos nacionales o provinciales, concesionarios, particulares -propietarios, arrendatarios, permisionarios, etc.-, o empresas contratistas o subcontratistas, por mandatos de las anteriores, que se encuentren interesados en ejecutar trabajos que afecten u ocupen la vía pública (...) deberán solicitar previamente la correspondiente autorización ante la Dirección de Estudios y Proyectos" dependiente de la Secretaría de Obras Públicas de la Municipalidad. Sin embargo, en esta obra llevada a cabo por Coemyc SA. la ordenanza parece haberse omitido ya que tal permiso no existiría.

Incumplimiento

Que la obra no esté autorizada incidiría en otras irregularidades. Entre ellas: en que la empresa ejecutante esté evadiendo, entre otros puntos, "una garantía por un monto equivalente al 10% del valor total actualizado de las obras" y "una contribución equivalente al 4%" del mismo valor destinado "al pago de los gastos que originen las tareas específicas de contralor de la obra".

Cabe señalar que es la Municipalidad, a través de agentes designados para tal fin, la que tiene a su cargo la inspección de los trabajos. Ahora... si la obra no cuenta con un permiso ¿cómo se pueden realizar los controles?

Otros interrogantes surgen del análisis de esta situación y del incumplimiento de la ordenanza. Entre ellos: ¿la municipalidad no debería conocer la realización de esta obra iniciada en marzo y por ende que no está autorizada?, ¿quién se hará responsable si, tal como expresa la reglamentación, ocurren daños a los vecinos y/o a bienes públicos?, o lo que es peor ¿quién pondrá las sanciones establecidas si la empresa ejecutante de los trabajos incurre en alguna anomalía respecto de cuestiones técnicas de la obra? Cabe recordar que meses atrás El Litoral se hizo eco de la queja de un grupo de vecinos por algunos problemas que generaba el frente de obra (Ver Reclamo disparador).

Reclamo disparador

El pasado 26 de mayo El Litoral publicó un reclamo de vecinos de Guadalupe Central fundamentado en que con la obra de desagüe cloacal observaban un "volver en el tiempo" ya que el pavimento de las calles, en algunos casos, y el mejorado, en otros, había sido destruido y, a medida que avanzaron los trabajos, no se lo fue reponiendo.

"Cuando se licitó la obra de cloacas estuvimos una semana sin poder sacar los autos de nuestros garajes. Es que, al ser una calle muy finita, tuvieron que romperla para conectar los caños y pasarlos por el medio", dijo un vecino de Pje. Judicial al 800. Y agregó que cuando terminaron los trabajos en esa cuadra "creímos que había quedado perfecto pero... no fue así".

La apreciación de este vecino se debió a que, posteriormente a las tareas efectuadas en el lugar y ante la primera lluvia que hubo, las calles empezaron a hundirse cada vez más a raíz de que la máquina empleada, para emparejar lo removido, no fijó bien la tierra.

"Existe un compromiso por parte de la empresa, a la que se le adjudicó la obra, de reponer el ripio o, como es el caso de la calle French o Tacuarí, el pavimento. De todas maneras, los vecinos no tenemos nada por escrito y es eso lo que nos preocupa. Lamentamos haber perdido el mejorado porque, si bien la obra era muy ansiada, es un volver hacia atrás", sostuvo el vecino.

El día posterior a que la nota fuera publicada, el mismo habitante de la cuadra que manifestó el reclamo se acercó a la redacción y comunicó que una máquina de la empresa había vuelto a pasar por allí y solucionado en parte el problema.

La obra

Cuando el Ministerio de Asuntos Hídricos de la Provincia anunció la adjudicación de la obra, también explicó que los trabajos abarcarían la instalación de una red cloacal de cañerías de PVC -de 0,160m y 0,200m de diámetro- que se conectaría a un colector para, posteriormente, dirigirse a la estación elevadora de líquidos cloacales ubicada en la intersección de las calles Matheu y Talcahuano; donde, además, se construirían salas de tableros y filtrado de gases.

Luego, y por medio de una cañería de impulsión, los líquidos serían descargados en la boca de registro del colector norte de la estación n° 1, en la intersección de las calles Pavón y Canónigo Echagüe; por lo que harían, además, 57 bocas de registro sobre la red de colectores y 484 conexiones domiciliarias. Hoy, de acuerdo con lo informado por vecinos de la zona, los trabajos están en plena ejecución y prontos de llegar a su fin.

De la redacción de El Litoral