Ubicado en un lugar estratégico de la ciudad de Rosario, se levanta el sólido edificio del Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino. Tiene en su entorno elementos de la naturaleza, y lo más inmediato, una nueva casa destinada a las expresiones del arte contemporáneo y de vanguardia; que funciona como anexo.

Por el ingreso principal se accede a planta baja. Nos encontramos con salas bien iluminadas, con luz natural y un sistema de iluminación artificial, que concentran obras de nuestro patrimonio artístico. Allí se produce el reencuentro con obras de un particular valor estético e histórico que provocan distintas vivencias.

Estos valores artísticos culturales conforman su legado con obras propias de las distintas especialidades, de artistas locales, nacionales y extranjeros, tales como Gambartes, Berni, Loza, Noé, Minujín, de Rivera, Sisley y Siqueiros, entre otros, en pintura. Siglo XX, los desnudos de Fontana y Alfredo Guido, se destacan en escultura.

En el área destinada a la escuela española del siglo XVIII, se aprecia "Palo más y pollos", firmada por Francisco de Goya y Lucientes, período 1746-1828, una obra ejecutada en óleo sobre tela, paleta limitada, fondo bajo acromático, otra pequeña obra 0,37x0,26, de Gerar David, titulada "La virgen y el Niño Jesús", un óleo sobre tabla.

Denota sensiblemente el paso del tiempo, el fragmento de un fresco, ejecutado sobre teja, perteneciente a la escuela italiana del siglo XVI, anónimo, elaborado con ocres y tierras, observándose el barrido del pincel. Su superficie cuarteada está protegida bajo un vidrio.

En el contraste, fotos de Vanzo, Grel, Carlos Alonso y otros penden de los muros, en la continuidad del recorrido visual. "Marginación y reconocimiento", década del 60 xilocollage, obra de gran tamaño.

Hay un conjunto de obras, en coherencia con sus autores y período, perteneciente al grupo Litoral. De Herrero Miranda, un especialista en el conocimiento del color y manejo de la materia, "Los Pacheco", óleo sobre tela, destacándose las figuras humanas, exaltadas con la luz, con fondo de color y valores bajos. Entre los conocidos, cromo al yeso, firmado por Leónidas Gambartes en 1954, que tituló "Maternidad en gris", superficie elaborada con finas pinceladas acuareladas, representa el universo: la madre, el niño, el cultivo, el paisaje. De este mismo autor, "Paisajes" 1943/44, óleos sobre soportes de madera, harboard; acuarela sobre cartón. Juan Grela, una témpera muy interesante, sin título; Hugo Ottman firmó un óleo sobre soporte de cartón, Julio Vanzo y "Los desnudos" 1936, de Musto, un exponente más de los diferentes estilos y temáticas, retratos y autorretratos.

Se han descripto parte de las obras expuestas, en planta baja, cuyas salas y nivel están destinadas a la mostración de las obras patrimoniales, las que se renuevan periódicamente.

Las salas de planta alta, destinadas a los Salones Anuales Nacionales y a muestras itinerantes, se vieron favorecidas con la renovación de pinturas en sus muros y la instalación de aire acondicionado.

Es de destacar el sistema de iluminación y seguridad que posee el edificio. Cada sala posee unos pequeños contenedores adosados a las paredes, con catálogos y otros recursos, que el visitante se autoprovee y a la vez se informa.

Es una institución abierta a todas las expresiones clásicas y de vanguardia. Además de las exposiciones en las distintas especialidades plásticas, la actividad en esta casa de arte está destinada a los públicos más diversos mediante otras expresiones, dentro de las bellas artes, como un modo de penetrar en la comunidad, que debe ser sensibilizada por la impronta del arte.