Señores directores: Vengo por la presente a realizar un recuerdo a la Estación del Ferrocarril Belgrano. Rememoración quizás cargada de nostalgia, pero tal vez necesaria para que muchas nuevas generaciones puedan llegar siquiera a vislumbrar la intensa actividad que allí se desarrollaba en décadas pretéritas.

Y quién sabe si no sirve de disparador para que en este bendito país vuelva el ferrocarril, obviamente más modernizado, mejor organizado y al servicio de la comunidad, ya no santafesina, sino nacional.>

Al respecto, cabe tener presente las reflexiones que diversos empresarios visitantes, tanto de Estados Unidos de Norteamérica y Canadá, como de Europa, Japón y China deslizaran en los últimos años, al no poder comprender cómo un país tan extenso carecía, prácticamente, de transporte ferroviario...>

Yendo al movimiento de la Estación del Belgrano, donde desempeñé tareas entre 1951 y 1989, fiel reflejo de lo que era el tráfico ferroviario en el país, entraban y salían 138 frecuencias semanales, entre las que podemos detallar las que cubrían el tránsito de ida y vuelta entre nuestra ciudad y destinos tan diversos como: Resistencia (vía Vera) y Resistencia (vía Tostado y General Pinedo), con 12 y 8 frecuencias semanales respectivamente; San Cristóbal (18); San Cristóbal vía Nelson (2); Tostado (12 por coche motor); Reconquista (6 por coche motor); Villa María (6); San Juan (4); Gálvez y Coronda (12); Retiro (12); Córdoba (12); Tucumán y Salta (6); Capilla del Monte (4); Retiro-Bolivia (el "Panamericano") (2); Roque Sáenz Peña (el "Oro Blanco") (4); Humboldt y Soledad (2 frecuencias semanales) y 16 trenes llamados locales que cubrían el trayecto Santa Fe-Laguna Paiva y viceversa.>

Cabe agregar que los trenes a Resistencia, Tucumán, Salta y distancias mayores llevaban vagón de encomiendas, vagón postal, coches de primera categoría, coches de segunda categoría, coche cocina-comedor, y hasta dos o tres coches dormitorio, con servicios de primer nivel, y que nunca circulaban con menos de 400 pasajeros cómodamente ubicados.>

Y que en el detalle prealudido, no incluí los trenes de carga que pasaban al lado de la estación Belgrano rumbo al Puerto de Santa Fe, gran cantidad de formaciones que provenían de distintos puntos de la provincia y del país y que constaban de no menos de cincuenta vagones que contenían cargas tan variadas como ganado, mercaderías, combustibles, frutas, etc.>

En fin, el tren suplió a la carreta y a la diligencia, y a su vez fue reemplazado por colectivos y camiones en políticas que, desde el Plan Larkin en la década del '60, hasta su casi desaparición en las postrimerías del siglo veinte, respondían a intereses particulares antes que al bien común.>

Bienvenido sea el intento gubernamental de reponer algunos servicios ferroviarios, sobre todo desde que el déficit en la materia (decían $ 1.000.000 diarios para mantener el ferrocarril en el país) parece darse en Capital Federal y el Gran Buenos Aires.>

Ernesto P. Poggio DNI. 6.190.791. Ciudad.>