Subsidios cruzados

Eloy Rodríguez

El verdadero jefe de la economía agropecuaria es el hombre de campo, por la simple razón de ser el dueño del producto terminado, de tener el discernimiento de seleccionar el lugar donde realizar la transacción comercial y efectuarla al precio que más le convenga. Los ujieres del zafio Secretario de Comercio Interior opinan que los ""argentinos no pueden pagar la comida a precios internacionales". Es exactamente al revés: los recursos deberían provenir de los extranjeros que, por ejemplo, pagan la carne a valor dólar.

El estado argentino, tácitamente, reconocería su paupérrimo intervencionismo, ya que no tendría porque recurrir al intento de querer hacer funcionar, sincronizadamente, subsidios, transferencias de recursos, compensaciones, reparaciones, etc., términos propios de una automedicación para una enfermedad buscada.>

Es tal la imbricación de medidas que, en casi todos los rubros agrarios, el verdadero jefe sufre la demora del resarcimiento prometido por lo que le han hecho perder.>

El sector avícola es el único que se benefició con el laberinto del sistema, pero los productores de huevos desconocen si están incluidos en esta metodología.>

En la actividad láctea, el antinatural procedimiento que procura que el tambero perciba lo que merece, eclosionó en el esperpento burocrático de requerir la apertura de dos claves de identificación bancaria, una para recibir los centavos provenientes del sistema estabilizador de precios y otra para los centavos derivados del aumento a las retenciones de las exportaciones de soja.>

A la espera del primer peldaño están los "feedloteros", los molinos maiceros, los productores de porcinos ( a 90 días de los anuncios, aún no cobró ninguno), las aceiteras y el trigo.>

Para el maíz, cotiza un 30% más que el año pasado, el gobierno prometió 500 millones de dólares para compensar dicho aumento. A la fecha sólo ha distribuido unos miles de pesos.>

Pero también la misma ONCCA sufre el nudo gordiano ya que la falta de claridad para especificar el universo de beneficiarios produjo demoras y omisiones, una de ellas la padeció el complejo aceitero por el "olvido" de Economía en fijar el precio interno, que difiere del valor sugerido por Moreno e impide la comparación para determinar la compensación. Aquí tampoco nadie recibió los subsidios.>

En la ganadería, la incertidumbre del precio final repercutió negativamente, pués se ha entrado en un proceso de liquidación de hembras y en la venta de animales livianos por la desmotivación del ganadero para seguir con el engorde. Vedada la exportación, el faltante de animales se produce por el mayor consumo interno.>

Al actual gobierno le cabe recaudar, controlar la evasión y distribuir, con la mayor equidad posible, la riqueza obtenida.>

Valga como ejemplo un campo que, ubicado en Pergamino, de 400 has., con óptimos nivel de producción y rotación (soja, maíz, trigo y soja de segunda, con buenos rendimientos por quintal), paga en concepto de retenciones, ganancias, impuesto al cheque, inmobiliario, ingresos brutos y otros, aproximadamente $ 1.600 por hectárea.>

Argentina exhibe antecedentes nefastos de intervencionismos, vedas al consumo interno (1951), situación opuesta a la actual, precios máximos, impuesto a las exportaciones, cuotas de faena, márgenes comerciales, etc., una película en blanco y negro, que hoy se repite en cinemascope tecnicolor.>

Rene Descartes, filosófo francés, decía "Daría todo lo que sé por la mitad de lo que ignoro". ¿No hará falta conocer esa mitad?>