Artes visuales
Tres exposiciones

Días atrás fue reabierta al público la Sala Cultural Guastavino e Imbert, sita en calle San Martín 2771, planta alta de la ciudad de Santa Fe, ampliándose felizmente el un tanto menguado espacio que tienen en nuestra ciudad tanto los artistas como el público que se interesa por el trajinar creativo de los creadores lugareños quienes, malgrado la chatura ciudadana, construyen el horizonte de mayor significación cualitativa en la trama social contemporánea, abriendo con sus obras rendijas por las que se puede intuir un futuro menos adocenado y convencional que el que cotidianamente exhibe la capital provincial.

En la sala de referencia y como inicio de un ciclo que se supone continuará a futuro, exhibe una colección de dibujos el artista plástico José Bastías, quien agrupa trabajos nuevos y otros ya vistos, interrelacionados en principio por el tratamiento técnico y la resolución formal de las imágenes convocadas en cada uno de los dibujos en exposición. Bastías construye sus obras dentro del concepto de figura-fondo, recortando a aquéllas con marcados límites y planos grisados que, salvo un pequeño grafito, giran en torno de la problemática de la forma humana, en los ángulos de rostros y desnudos. El autor trata precisamente el rostro a manera de autorretrato, recortando por paños flotantes que quiebran la simetría, y ocasionalmente refuerza la atención en los ojos, indicándolos como puerta de acceso, comprensión y valoración de lo que en el plano se desenvuelve. Las imágenes se recortan con una aproximación descriptiva de tono naturalista, apelando a los contrastes lumínicos luz-sombra que ocasionalmente omiten los pasajes de grises intermedios, desarticulándose la intención expresiva del conjunto que se organizó como forma plástica central del trabajo. El dibujo "Sfumato", al modo "leonardesco" aparece un tanto forzado por la violencia de los contrastes entregrises, restándose u omitiéndose las modulaciones que otorgan la idea de carnalidad háptica a sus trabajos. Vale reconocer que el tratamiento del desnudo tropieza en nuestro medio con pacaterías de todo tipo y no resulta sencillo, para quien los realiza y expone, sortear la frecuente maledicencia en torno. Mas cuando se trata del lenguaje del arte, las autolimitaciones resultan cuando menos perniciosas para el sentimiento de libertad que es esencial en este terreno. El autor controla cada instancia temática soslayando los enfoques compositivos de riesgo visual, sesgando la potencia de cada obra.>

Cierto clima de surrealismo campea en algunas imágenes, sobre todo en los retratos con ocasionales acentos de color que operan como diferenciadores de subespacios, sin incidir en la fuerza expresiva de los mismos.>

Zulma Molaro - "Tercera Amalgama"

En el Museo Municipal de Artes Visuales Sor Josefa Díaz y Clucellas, sala Susana Bachini de Barthes, la artista plástica Zulma Molaro ha inaugurado una exposición de sus trabajos, óleos de formato medio y menor, en los que articula imágenes y poemas en la voluntad de establecer un lazo relacional que genere la experiencia estética en plenitud. Zulma Molaro es autora de pinturas figurativas de imagen descriptiva. En ellas, la praxis poética se ajusta a la mayor verosimilitud posible, configurándose una suerte de "instantánea" situacionales que el ojo de la pintora recorta y organiza en el plano plástico con un tratamiento prolijo en la disposición de las formas, luces y texturas. El tema elegido para la construcción de las pinturas prima por sobre la articulación plástica, razón que induce al vínculo literario que se desprende de la proposición autoral de "Tercera Amalgama". Los poetas crean a partir de la imagen dada ofreciéndose dos realidades que se materializan con recursos diversos. Se procura una confluencia intrapsíquica que se resuelve en tanto el espectador se dispone a aceptar la proposición, induciéndose a uno de los lenguajes convocados a operar como sostén del otro indistintamente y según la ocasional preferencia de cada quien que se acerca a las proposiciones expuestas. La elección depende de quien mira y siempre se da la alternativa temporal. Los tiempos de lectura de cada manifestación expresiva son diversos; el tiempo que transcurre es la voz y la palabra encadenada, y el tiempo cristalizado en espacio inmóvil es la pintura, de modo tal que las soluciones, esto es la lectura global y unívoca se tensa constantemente en un compromiso estético que obliga a focalizaciones parciales alternativas.

A esta proposición expositiva, agrega Molaro una colección de óleos de pequeño formato, los que instalan por sí mismos en la apreciación como poemas plásticos en los que la palabra es reemplazada por la luz, organizadora y vinculante de los paisajes que no se describen puntillosamente, sino que se interpretan con tonalidades de restellante vitalidad. Aquí, la autora resuelve con mayor elegancia y soltura, con mayor lirismo plástico sus percepciones estéticas.>

En estas obras, la luz cromatizada elude el contorno de las formas convocadas con una praxis plástica de tono preimpresionista, en ellos la libertad del gesto expresivo enriquece cada proposición validándola en sus sonoros silencios.>

Silvina Helbling - "Arte x parte"

En el recientemente inaugurado Espacio de Arte-Calanchini-Brieva, sito en galería Saguier, planta alta la fotógrafa Silvina Helbling exhibe una colección de fotografías color de diferentes formatos, muy bien dispuestas en el ámbito citado que remiten temáticamente al proceso de restauración del teatro municipal 1° de Mayo. Con perspicacia, Helbling documenta los pasos y el proceso de reinstalación del teatro, logrando piezas documentales que se despegan del mecánico registro para configurarse, metáforas de rica subjetividad. Diferentes ángulos y diferentes enfoques; particular acentuación de las luces y los grupos materiales se enlazan en textos icónicos de particular interés, los que con el correr de los años eventualmente devendrán en piezas de interesante documentación. La fotógrafa impregna con su subjetividad y su densidad poética cada toma lograda. El misterio de lo presentido que acecha en las sombras, la vida latiendo en cada perfil enfocado hacen de esta muestra un interesante recorrido que ratifica que la expositora otorga al proceso mecánico de la fotografía el aura sugerente intrínseca a su mirada.

Domingo Sahda