Primero desapareció un herido, ahora su familia
El barrio 29 de Abril otra vez desbordado por la delincuencia
Dos de los heridos el domingo siguen internados, un tercero volvió, pero fue llevado por una patrulla. Un cuarto herido desapareció de la escena y lo siguió su aterrada familia.

José Luis Pagés

Dos de las tres personas que con graves heridas de bala y cuchillo ingresaron al hospital José María Cullen la noche del último domingo, continúan internadas en estado delicado.

Mientras, se pudo saber que un tercer hombre ya recibió el alta médica y regresó al 29 de Abril, barrio donde se produjo el incidente que lo tuvo como protagonista involuntario.>

En tanto, qué fue de un cuarto joven que, según dichos de su madre resultó herido en el confuso entrevero, es un misterio: su ingreso no fue registrado en ninguno de los sanatorios u hospitales de la ciudad.>

Tras el grave episodio, se pudo saber que uno de los presuntos autores de los disparos -un tal Petete-, fue detenido por agentes de la Seccional 8a., cerca del lugar del hecho, Rivadavia y callejón Roca.>

Fuentes policiales dijeron que Petete no es el único individuo que está bajo sospecha y agregaron que una comisión de Investigaciones busca por sus nombres y apellidos a otros involucrados en el enfrentamiento.>

Vecinos del barrio que alojó a muchos inundados en 2003, dijeron que una patrulla "se llevó a un herido que salió del hospital", pero en Jefatura aclararon que el hombre fue invitado a cumplir con trámites de rutina.>

Lo que no pueden explicar los vecinos, tampoco la policía, es qué fue de Héctor Lobaisa, quien al decir de su madre se contó entre los heridos. Ahora, tampoco se sabe qué fue de ella y demás familiares, lo que permite imaginar que todos huyeron temiendo males mayores.>

Tampoco nadie sabe decir quiénes y por qué motivo se enfrentaron el domingo con armas de grueso calibre. Pero, alguna explicación se podría encontrar en las sucesivas invasiones de la delincuencia que debieron padecer los inundados del 2003.>

Desde entonces, en medio de un estado de inseguridad permanente, muchos grupos familiares debieron abandonar el vecindario cuando traficantes y proxenetas irrumpieron entre ellos, una y otra vez, como renovadas ondas de la creciente.>

La noche del domingo empleados de Dipaes y Cobem asistieron y trasladaron a Luis Gómez, eviscerado a puñaladas. También Roque Rosel (37) resultó herido por dos perdigonadas de escopeta y Maximiliano Da Silva, (21) sufrió una lesión en la cabeza, además de heridas de bala, en pecho y mano derecha.>

Héctor Lobaisa (20) también habría sido atacado y herido, no obstante, de él sólo quedaron abundantes huellas de sangre, pero no se sabe dónde fue asistido.>