El escritor argentino Pablo de Santis puede ser calificado, sin riesgo de posibles equivocaciones, como un creador prolífico. De hecho, a lo largo de los años incursionó en los más diversos géneros, con destacadas intervenciones en la historieta y la literatura fantástica.
Recientemente, De Santis se despachó con una novela que probablemente pueda llegar a incluirse entre las más destacadas de la literatura argentina, al menos la que corresponde a los últimos años. Se trata de "El enigma de París". A lo largo de sus páginas, De Santis se despacha con una intriga que se produce en el París de 1889, donde la inevitable llegada de los tiempos modernos aparece cristalizada en la construcción de la Torre Eiffel.>
En la "Ciudad Luz" se dan cita Los Doce Detectives, los investigadores más famosos del mundo, para revelar sus casos más célebres y dar a conocer sus métodos. En ese marco se produce la enigmática muerte de uno de ellos, lo que pondrá en jaque a los investigadores, que tratarán de desentrañar el misterio.>
La sola lectura del argumento provoca la inevitable asociación con los tramos más célebres del género policial. Se puede ver claramente entre líneas en esa docena de famosos investigadores, la influencia de autores como Arthur Conan Doyle, creador del perspicaz Sherlock Holmes, o de la inefable Agatha Christie, con su no menos sagaz Hércules Poirot.>
Lo cierto, es que De Santis rinde un homenaje a uno de los géneros más atrapantes de la literatura universal, cultivado -en sus diversas vertientes- por escritores de la talla de Edgar Allan Poe, Raymond Chandler y hasta el propio Jorge Luis Borges. Una corriente literaria capaz de mantener en vilo al lector, aun en las horas más adversas. Y -según los entendidos- la novela de De Santis logra captar esa esencia.>
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