Desde este fin de semana, los visitantes que se acerquen al céntrico barrio londinense de Soho serán advertidos mediante un mensaje de texto enviado a sus teléfonos móviles de la existencia de clubes de striptease que viven de estafar a turistas y ejecutivos ebrios, informó el ayuntamiento de Westminster.
"Cinco libras para entrar, 500 para salir. Criminales operan en algunos de los locales de alterne del Soho. No entres sin saber qué obtendrás con tu dinero", es el contenido de los mensajes que desde hoy recibirán aquellos que se acerquen a 30 metros de distancia de tres de los citados locales.>
Se trata de la primera vez que una autoridad local utiliza este sistema de comunicación para combatir el crimen.>
Desde hace más de diez años, el Soho es objeto de una vigilancia policial que pretende acabar con los abusos que cometen un buen número de clubes relacionados de alguna forma con el negocio del sexo.>
Ante el reclamo del "striptease" o de un espectáculo de sexo en vivo y en directo por la módica cantidad de 5 libras (unos 7,37 euros), precio aproximado de la consumición de una bebida no alcohólica, los que acuden a estas salas se encuentran con que el espectáculo no es el originalmente anunciado y que la factura de lo consumido en su interior llega a alcanzar las 500 libras (aproximadamente, unos 737 euros).>
Se trata de uno de los principales problemas de criminalidad en esta área londinense, donde un gran número de turistas visita estos locales, atraídos por las llamativas mujeres que los reclaman desde sus puertas.>
Además, en caso de negarse a pagar, empleados de seguridad del establecimiento en cuestión los amenazan o acompañan a los cajeros más cercanos.>
La dificultad para clausurar esos clubes radica en que todos ellos requieren licencias para vender alcohol.>
En los últimos doce meses, la policía ha registrado 41 casos de este tipo de crímenes, entre los que se incluyen agresiones a los individuos que se niegan a pagar.>
Ayudados por la tecnología Bluetooth, las autoridades locales pretenden enviar cada día entre quinientos y mil mensajes, aunque antes de desplegar el texto preguntan al destinatario si desea recibirlo.>
