SILVANA Y EDUARDO GÓMEZ COUTO
Una pareja tanguera que regresa pasional
A fines de 2001 partieron con sus hijos hacia Italia. Allí enseñaron a bailar el ritmo del dos por cuatro y realizaron diversos trabajos para mantenerse. Ahora, volvieron para radicarse en su ciudad natal y preparan un espectáculo que estrenarán en noviembre.

"Somos una pareja de tango que cuando comenzó la crisis en nuestro país, a fines de 2001, partimos hacia Torino, Italia. El inicio fue muy difícil, el dinero se nos terminó en un día. Pero de a poco, con mucho sacrificio, salimos adelante y tratamos de cumplir el sueño de bailar en Europa".

Silvana y Eduardo Gómez Couto no sólo forman una pareja de bailarines, también son padres de Isadora, de ocho años, y Atahualpa, de doce. Unidos por la danza, especialmente por el folclore y el tango, comenzaron su carrera en los escenarios a principios de los '90, crearon ballets en el interior de nuestra provincia, actuaron en varios espectáculos realizados en esta ciudad, y durante los años que vivieron en el noroeste italiano se dedicaron a "la enseñanza del tango argentino".

Ahora, a cuatro meses de su regreso a Santa Fe, preparan "Pasional", el show de "música, canto, baile y poesía" que estrenarán el 10 de noviembre en el pub La Nada. Y allí, estarán con la compañía que tutelan, Tango Juntos.

UN "PIACERE"

Silvana comenzó a bailar a los dos años y medio, y su esposo, Eduardo, a los cinco. Él folclore, y ella danzas clásicas. En 1991 se abrieron paso en el ritmo del dos por cuatro, estudiaron en Buenos Aires, obtuvieron premios en festivales nacionales, hasta que el estallido económico de 2001 los condujo a Italia en busca de oportunidades.

En aquellas tierras se encontraron con que "a los europeos les gusta muchísimo el tango. Lo estudian. Cuando llegamos, abordábamos más el tango de salón, pero les gusta más lo espectacular, el show -señala Silvana-, y nos tuvimos que adaptar. Por eso nos dedicamos a la enseñanza y al espectáculo".

Sin embargo, para subsistir debieron "hacer de todo". "Allá, el baile no se toma como un trabajo, sino que es un `piacere', como un gusto. Los argentinos que pueden vivir de eso son los que van, trabajan de eso y regresan a Argentina -explica-. Nosotros, en cambio, teníamos que tener otro trabajo para contar con el permiso necesario para vivir. A los que no tenemos ciudadanía, nos exigen tener una recaudación anual".

Así fue como ella limpió casas para contribuir a la economía familiar, porque "el sistema es muy duro, se trabaja de sol a sol". Su esposo, Eduardo, es veterinario, pero su diploma en Italia no era reconocido, por lo que "tuvo que trabajar en una empresa y aprender a hacer otras cosas, como por ejemplo, ser electricista".

VOLVER

El retorno a nuestro país se produjo en junio pasado. "Nos volvimos porque miramos las caras de nuestros hijos. Pensábamos que yéndonos de acá, les podíamos dar más cosas. Sí, más cosas materiales -afirma Silvana-. Pero allá la vida es muy fría, no hay vida social, estábamos muy tristes, y decidimos regresar. Sabíamos que la vida acá iba a ser un poco dura, lo está siendo, pero cenamos juntos, compartimos cumpleaños con nuestra familia... Allá eso no existe".

La decisión de volver trajo consigo expectativas por retomar sus actividades, dedicarles más tiempo a los hijos y, al mismo tiempo, motivó una enorme emoción. "Fue muy emocionante volver... no nos imaginábamos que iba a ser así. Cuando el oficial de policía nos firmó los pasaportes, dijo `bienvenidos de nuevo a nuestro país', fue una emoción tremenda. Fue muy lindo", expresa Silvana.

La pareja regresará a Italia el año próximo para trabajar y reencontrarse con la "pequeña familia" que formaron entre pasos y piruetas tangueras.

Una noche espectacular

Silvana y Eduardo aspiran a que "Pasional" sea una "noche espectacular e inolvidable". Por eso planifican una cena show, con baile, canto, un menú acorde a las circunstancias, y coreografías nutridas de los colores rojo y negro, "que son los que representan al tango".

"Nos sentimos en la obligación de hacer algo por Santa Fe, después de cruzar el océano. Haber estado allá fue una experiencia que nos sirvió mucho, que nos dio fuerzas para hacerlo también en nuestro país", destacan quienes optaron por radicarse nuevamente en nuestra ciudad.

Y para llevar a cabo el montaje de su espectáculo, contarán con la participación de:

-Cintia y Lucas Panero. Resultaron semifinalistas en el Campeonato Mundial de Tango 2007. Actúan en Rosario, y cursan su perfeccionamiento en Buenos Aires.

-Andrea Masuero. Cantante. Ganó el Pre Cosquín en el rubro solista de tango, en 1998. Dirige la Academia Musical Soberanía, en Santo Tomé.

-Gustavo Re. Cantante. Se inició en el Quinteto Contemporáneo de Tango dirigido por Néstor Bucca, en 1997. Actualmente se perfila como intérprete del repertorio de Roberto Goyeneche.

-Jorge Martínez. Guitarrista, autor y compositor. Desde 1977 incursiona en la música popular argentina. Es arreglador de grupos musicales y jurado técnico en festivales nacionales.

-Marcos Montes. Bandoneonista. Egresado del conservatorio Albistur de Buenos Aires, estudió armonía con Miguel Delgado y música con Virgilio Expósito.

Las entradas anticipadas para el show se pueden adquirir en López y Planes 3508 o en bulevar Pellegrini 2420. Informes: (0342) 154 767627 / 28.

De la redacción de El Litoral