Sociedad Rural de Rosario
La Sociedad Rural de Rosario manifiesta su disgusto y frustración ante el aumento a las retenciones a las exportaciones de cereales y oleaginosas que provocan una importante caída de su precio.
Este tipo de maniobras tiene como primera consecuencia el empobrecimiento de los pueblos y ciudades del interior del país que se habían visto beneficiadas por el derrame de riquezas genuinas provocadas por la mejoría de los precios relativos.
Es evidente el propósito puramente fiscalista de esta medida con el apoderamiento, por parte del Gobierno Nacional, de la plusvalía generada por los precios externos de nuestros productos.
El antedicho apoderamiento crea un valor interno que debemos generar con costos internacionales que han sufrido un aumento del 50% en el último año. Esto provocó una modificación anímica de los productores que ven una vez más la modificación de las reglas de juego cuando ya se ha terminado la siembra.
Creemos que esto va a traer lenta y progresivamente un proceso de desinversión por parte del sector que en los últimos años fue el mayor inversor anual de la República Argentina.
Esto es incongruente con la prédica del Estado de la búsqueda de inversores en un país que dispone de capitales exiguos.
El imaginario social nos coloca como grandes rentistas, cuando el rinde sobre el capital invertido para el productor con campo propio sólo llega al 3% del capital de la empresa.
La imposición unilateral de estas gabelas sobre un sólo sector de la economía Argentina crea una situación de discriminación contraria a los principios fundadores de la Patria.
Creemos necesario redistribuir la carga fiscal con los otros sectores de la economía recuperada.
Queremos recordarle a la sociedad que nos estamos acercando en este sector de la economía al tan criticado 1 a 1 que generó la desaparición de más de 100 mil productores argentinos, aumentándose el proceso de concentración de la tierra.
Somos concientes de haber llegado a un límite que nos impide soportar pequeñas modificaciones de la situación internacional o problemas climáticos internos.
En virtud de lo antedicho, solicitamos la reconsideración de lo actuado y el establecimiento de un cronograma de desaparición progresiva en muy pocos años de la totalidad de las retenciones.
